El Real Mallorca ha calificado este martes de «varapalo económico» jugar el sábado ante el FC Barcelona a puerta cerrada por la crisis del coronavirus, según ha declarado Alfonso Díaz, nuevo director ejecutivo de la entidad balear.
«Tenemos tres partidos fuertes, con los tres equipos más grandes de la Liga (Barcelona, Real Madrid y Atlético de Madrid), y evidentemente es un varapalo, pero no podemos hacer otra cosa. Hay que seguir luchando por conseguir los objetivos económicos que nos hemos impuesto como club», ha señalado Díaz.
El directivo ha señalado que llevan «días trabajando con las entidades pertinentes en temas de protocolo interno para tomar las medidas necesarias».
«Es algo extraordinario que excede de nuestras competencias, no podemos decidir, es un tema de sanidad pública», ha añadido.
Con respecto al dinero que el club debe devolver en concepto de entradas ya vendidas, Diaz ha asegurado que todos los aficionados lo recuperarán siguiendo unas pautas que harán públicas entre este martes y el miércoles.
Sobre la posibilidad de aplazar el partido y no jugarlo a puerta cerrada, el directivo mallorquinista ha dicho que esa era una opción «complicada». «Hay que verlo. Luego hay una Eurocopa, no sé cuánto se puede aplazar, qué fechas hay; sabemos que el calendario a nivel deportivo suele ser muy estrecho», señaló Alfonso Díaz.