El Palma Futsal sueña con otra final. El cuadro mallorquín ha vuelto a aprovechar el factor cancha para reforzar su candidatura al título de Liga y poner al Barcelona contra las cuerdas. Los de Vadillo, férreos en defensa y punzantes en ataque, superaban este sábado en Son Moix al conjunto azulgrana y sumaban el primer punto de una serie de semifinales que podrían rematar el próximo martes (4-2).
El partido iba a pintarse muy pronto de verde. Aún no se habían cumplido los tres primeros minutos de juego y los de Vadillo le sacaban el jugo a la pizarra con un saque lateral envenenado de Fabinho que Bruno Gomes remataba a puerta anticipándose a su marca para abrir el cofre. Un gol para encender la mecha de la eliminatoria y plantarle al Barça las primera piedras en el camino.
Obligado a responder, el conjunto azulgrana daba un paso adelante. Asumía el control del balón aunque el mando a distancia del encuentro lo seguía teniendo el Palma, ordenado y seguro atrás. Barrón, Marcelo y Fabinho, hasta dos veces en una misma jugada, mantenían a los mallorquines a salvo.
El Barça iba a opositar al empate hasta dos veces, ambas muy claras. Primero era Adolfo el que no atinaba en su remate final y después era Eric Martel el que malgastaba un doble penalti ante Barrón.
El inicio de la segunda mitad también iba a ser explosivo. Antes de los primeros treinta segundos Mario Rivillos le sacaba punta a una genial maniobra de Ernesto para superar por abajo a Dídac y ampliar la ventaja del Palma.
El equipo de Tino Pérez no estaba dispuesto a dejar que la batalla se apagara tan pronto y Adolfo, con una jugada de puro talento, volvía a apretar el partido. A partir de ahí, llegaba el momento Muller. El portero del Palma desquiciaba a los atacantes del Barça, que llegaban al epílogo sin otra opción que la perseguir el empate a través del portero-jugador.
El ejercicio de resistencia del Palma era encomiable. El Barça se desesperaba sin llegar a nada y los de Vadillo, firmes y compactos, aún iban a tener tiempo para anotar cuarto gol en pleno caos visitante. Fabinho sellaba la sentencia y acercaba al equipo mallorquín a la fantasía de una nueva final. El martes, en el Palau Blaugrana la tendrá en su mano.
sargantanaComo siempre