La Dirección General d'Esports del Govern ha recibido 11 denuncias y ha tramitado seis expedientes sancionadores por violencia en espacios deportivos de Baleares, a lo largo de la temporada 2022-2023. Este ha sido uno de los asuntos que se han tratado este miércoles en la Comisión contra la Violencia en el Deporte de Baleares, en la que se ha informado del seguimiento de las Actividades o Competiciones de Especial Seguimiento (ACES) de la temporada 2022-2023 y de las sanciones administrativas deportivas tramitadas por violencia, en la grada y venta y/o introducción de alcohol en las instalaciones deportivas, según ha indicado la Conselleria de Turismo, Cultura y Deportes en un comunicado. Allí los miembros de la comisión han informado sobre los expedientes sancionadores tramitados por parte de la Dirección General de Deportes entre el último trimestre del 2022 y el 2023.
El departamento que dirige el conseller, Jaume Bauzà, ha concretado que las denuncias se deben a «faltas de respeto, comportamientos agresivos, peleas, desobediencia a los agentes de la autoridad, invasión del campo de juego y actitudes racistas y xenófobas», que el conseller ha especificado que «fundamentalmente se han producido en el deporte amateur».
Por otra parte, con el objetivo de prevenir la violencia en el deporte, en la comisión se ha abierto la posibilidad de «establecer un plan de creación de gradas videovigiladas en las instalaciones deportivas de Baleares». Para estudiar esta medida, la conselleria ha avanzado que se elaborará un informe jurídico por parte de las administraciones, que garantice la protección de datos de los asistentes.
Las ACES son aquellos eventos en los que existe algún tipo de riesgo de que se produzcan actos o actitudes violentas durante los mismos, por lo que se establecen dos categorías distintas para estas actividades y competiciones, ACES 1 (de mayor riesgo) y ACES 2. La declaración de alto riesgo corresponde a la Comisión contra la Violencia en el Deporte de Baleares, también puede hacerse de oficio o a propuesta de los ayuntamientos o federaciones deportivas, e implica adoptar medidas especiales de prevención contra la violencia y de seguridad. La comisión se creó como órgano al que le corresponde prevenir cualquier tipo de acción o manifestación de violencia, racismo o xenofobia, o que pueda generarla, como consecuencia de actividades o competiciones deportivas en el ámbito territorial de Baleares.
En ese sentido, ha incidido en que esta comisión debe trabajar para que no se repitan estos hechos y, apoyar a los clubes y federaciones que «muchas veces son víctimas de estos actos incívicos o de violencia de personas que van a ver el deporte a los estadios o pabellones». Finalmente, el conseller ha agradecido la labor de los diversos organismos y autoridades para «intentar erradicar la violencia en el deporte», que es «por lo que deben velar las administraciones públicas».