Después de permanecer más de cuarenta días sedado, en coma inducido y postrado en una cama de la UCI de un hospital de Girona, Joan Nadal comienza a ver la luz. El triatleta mallorquín, de 42 años, se encuentra en planta y las previsiones de recuperación son optimistas después de casi dos meses sumido en la oscuridad más absoluta. Aunque tanto la familia, que prefiere guardar silencio de momento, como los médicos se muestran cautos, el deportista de Llucmajor divisa la meta de la carrera mas complicada de su vida.
La vida de Joan Nadal sufrió un golpe inesperado durante la disputa del Campeonato de España de Triatlón de Larga Distancia. Fue el pasado 13 de mayo cuando el triatleta mallorquín, una de las grandes figruas de este deporte a nivel local y nacional, sufrió un gravísimo accidente en la localidad catalana de Platja d'Haro. Tras superar el segmento de natación con un tiempo de 53:22, Joan Nadal se encontraba en pleno recorrido sobre el asfalto cuando perdió el control al pasar por un badén de la carretera y se golpeó con los guardarraíles. La dureza del impacto sobresaltó a los propios participantes, que reclamaron de inmediato la asistencia médica para el de Llucmajor.
Fue trasladado de forma urgente al hospital de Girona. Fue intervenido de urgencia por un traumatismo craneoencefálico. Durante estos casi 50 días, también ha sido operado de la espalda. Ahora, aunque hay que se cauto, parece que lo peor ya ha pasado y que Joan Nadal puede celebrar su victoria más preciada.