Con las secuelas del codazo reflejada en su rostro y el sufrimiento marcado a fuego en las caras de su mujer Laury, y de sus padres, Iván y Gladys, y con su hija Jauryn's, de cuatro años, extrañada de tanto bullicio en su domicilio, Juan Arango (Maracay, 1980) trata de recuperar la rutina diaria. Cinco días después de que la rabia de Javi Navarro le enviara a la Unidad de Cuidados Intensivos, el futbolista venezolano abrió las puertas de su casa a Ultima Horapara detallar su estado físico («espero reaparecer dentro de tres semanas, ante el Zaragoza»), meditar en voz alta sobre la acción de Javi Navarro («si no cambia su estilo de juego, mejor que no vuelva a un terreno de juego») y agradecer la solidaridad recibida desde todos los rincones del mundo («me han apoyado mucho»).
Arango atendió a este periódico en su domicilio, junto a su familia, después de haber visitado a sus compañeros en la Ciudad Deportiva Son Bibiloni, un escenario que espera pisar antes de lo que los médicos recomiendan. Un dolor de cabeza permanente, los cuarenta puntos de sutura del labio y el quemazón que le produjo en la garganta el tubo de guedel son las secuelas que le recuerdan el episodio más triste de su carrera deportiva.
-¿Cómo se encuentra y cuándo espera volver a
jugar?
-Estoy muchísimo mejor. En cinco días me he recuperado bastante
bien en relación a cómo estaba, se me ha bajado mucho la
inflamación de la cara y espero reaparecer en un máximo de tres
semanas.
-Ha visto la entrada de Javi Navarro en varias
ocasiones, pero todavía no ha tomado una decisión sobre qué postura
judicial adoptará.
-Aún no sé qué voy a hacer, ni lo he pensado, pero sí sé que fue
una entrada bastante brutal. En estos momentos, sin embargo, estoy
pendiente de mi recuperación y de estar a disposición del
entrenador.
-¿Cree que el Comité de Competición debe sancionar a
Javi Navarro?
-Yo digo que sí, pero son ellos los que toman la decisión. Ahora
mismo me encuentro en la etapa inicial de mi recuperación y me voy
a centrar más que nada en eso. Mi representante y el club ya se
están moviendo en esos temas. Lo que me preocupa es recuperarme lo
antes posible.
-El jugador del Sevilla dijo que había realizado esa
entrada para protegerse...
-Si así se protege él... Yo lo respeto, pero no son formas de
protegerse. Entonces, si él hubiese querido hacer falta, hubiera
matado a alguien. No quiero criticar a nadie, pero también en esos
términos de protección se está expresando el presidente del
Sevilla. Ha sido indignante para mí escuchar esas declaraciones,
decir que mi entrada era una gilipollez. Me parece que o no ha
jugado nunca a fútbol o es que no le ha ocurrido nunca lo mismo que
he pasado yo o lo que sufrí el domingo.
-Su padre subrayó el otro día que Javi Navarro había
cometido un intento de homicidio. ¿Está de acuerdo?
-No lo sé. Puede ser, pero no sé si será esa la palabra. Mi padre
lo pudo haber dicho por el nerviosismo, porque estaba en Venezuela,
porque no estaba enterado al cien por cien de la situación y quizás
lo dijo porque es mi padre, porque el que estaba ahí en el suelo,
agonizando, era su hijo y lo dijo así. Puede ser que sí y puede ser
que no. Hablar de intento de homicidio suena un poco fuerte, pero
sí que fue una entrada bastante dura que me pudo ocasionar la
muerte.
-¿Los médicos le han comentado qué sucedió en esos
instantes posteriores a la entrada?
-Me han hablado muy poco. Sólo me dijeron que estuve bastante
mal.
-¿Ha hablado con alguien del Sevilla?
-No, con nadie. Ni me interesa hablar con nadie después de las
declaraciones que han realizado.
-Imagine que tiene delante a Javi Navarro, ¿qué le
dice?
-Nada. Me las guardo para mí. No quiero entrar en polémicas y por
eso me las guardo para mí.
-¿El hecho de que lo pueda demandar por los tribunales
ordinarios depende de la sanción del Comité de Competición o de lo
que dictaminen sus abogados?
-No sé qué puede pasar. El Comité de Competición tiene que dictar
sentencia y confío en que pueda tomar la decisión que se
merece.
-¿Si fuera Alfredo Flórez (presidente del Comité)
cuántos partidos le sancionaría?
-No soy el presidente y no puedo decir qué sanción le
impondría.
-¿Sería justo que volviera a un campo de fútbol o, por
el contrario, debería ser suspendido de por vida?
-Si va a jugar de la misma manera, mejor que no vuelva a un terreno
de juego. Pero la decisión es del Comité y la forma de jugar
depende de él, de si sigue jugando y de si sigue jugando de la
misma manera. No sé qué decidirá.
-Su cesión finaliza el próximo 30 de junio, pero parece
que la intención del club es seguir contando con sus servicios.
¿Estaría dispuesto a continuar en la Isla?
-Yo estoy muy agradecido al Mallorca por haberme dado la
posibilidad de jugar en la Liga. Seguiré aquí con mucho gusto, es
una ciudad que me encanta, y me quedaría sin dudarlo. Pero ahora
hay que terminar esta temporada y ver nuestras posibilidades de
permanencia. Estoy enfocado en terminar esto bastante bien y en
dejar al equipo en Primera.
-¿No renuncia a reaparecer antes de que finalice la
temporada?
-No. Yo digo que voy a jugar y que estaré recuperado en tres
semanas. Ojalá que pueda estar para el partido contra el Zaragoza.
Esa es mi meta, aunque los médicos consideran que necesitaré más
tiempo.
-Su estilo de juego es de choque y balones aéreo. ¿Cree
que puede afectarle todo lo que sucedió el domingo, que tendrá más
miedo a la hora de saltar?
-No lo sé. Ahora, cuando hago movimientos bruscos, me duele mucho
la cabeza, y eso es lo que puede retrasar más mi vuelta a los
terrenos de juego. Pero no tendré miedo.
-La plantilla del Mallorca y sus compañeros de selección
le han arropado bastante.
-Sí, me han apoyado mucho y se lo agradezco. Los jugadores de mi
país me han llamado en esta semana tres veces cada uno para
animarme y los de aquí fueron dos o tres veces a visitarme.