Carlos Montes de Oca
Mientras el mallorquinismo lloraba en silencio la pérdida de una
porción notable de su historia, del mejor jugador que jamás haya
lucido la camiseta roja, una bocanada de aire fresco entraba por
las ventanas del vestuario. Una muesca del destino, un presagio o
una simple coincidencia empujó a Francisco Javier Farinós Zapata
(29-3-1978, Valencia) hasta la sala de prensa del estadio de Son
Moix el mismo día y casi a la misma hora que Samuel Etoo Fils era
aclamado como nuevo jugador del Barcelona en la otra orilla del
Mediterráneo. La llegada del ex jugador de Valencia, Villarreal e
Inter de Milán, que se ha comprometido para las dos próximas
temporadas tras rescindir el año de contrato que le restaba en el
club italiano, amortiguó en cierta medida el golpe sufrido por la
marcha del delantero camerunés.
Farinós restó importancia al hecho de que su primer día en la isla hubiera coincidido con el fin de la era Etoo: «Puede ser un día especial para el club por la marcha de Samuel, pero también es un día especial para mí, que inicio esta etapa con toda la ilusión del mundo. Se va un grandísimo futbolista, pero hay una plantilla con calidad suficiente para que su ausencia se note lo menos posible». Presentado por el presidente del Mallorca, Mateo Alemany, que le calificó como un jugador «contrastadísimo al que no pudimos fichar hace dos temporadas por su caché», el centrocampista valenciano se mostró «feliz» de regresar a la Liga española después de tres temporadas y media agridulces en el Inter -apenas disputó 49 partidos marcando 2 goles en escudetto- y esperanzado en repetir el rendimiento alcanzado en la segunda vuelta de la temporada 2002-03, cuando recaló cedido en el Villarreal de... Benito Floro.
La presencia del técnico asturiano en el banquillo isleño «no me da ninguna ventaja con respecto a mis compañeros. En absoluto. Comienzo desde cero, igual que todos, y espero hacerme un hueco. Conozco al míster y sé que quien no esté a tope, no jugará». Farinós no profundizó en su experiencia en eCalcio porque «no ha sido todo lo buena que hubiera deseado» aunque destacó que «un jugador siempre está aprendiendo». Del Mallorca apuntó que «está trabajando para construir un proyecto deportivo ilusionante» y sobre el hecho de ser el fichaje estrella de cara a la próxima campaña dijo que «cada uno tiene que asumir su propia responsabilidad».