El Club Nàutic s'Arenal (CNA) ha amanecido este martes muy pendiente de lo que sucedía a más de 10.000 kilómetros en Enoshima (Japón), donde su regatista Paula Barceló, junto a la gallega Támara Echegoyen, se han quedado a las puertas de subir al podio de los Juegos Olímpicos de Tokio en la clase 49erFX. Entre el sinsabor inicial por el cuarto puesto y el orgullo por el trabajo de las campeonas del mundo se ha vivido una Medal Race que ha deparado un desenlace cruel para la mallorquina y la gallega.
«Es un momento difícil, pero hay que estar muy contentos porque han sido cuartas y hasta el último segundo han estado luchando por todo. Lo han hecho fantástico y, aunque nos hubiera gustado que lograran la medalla, estamos muy orgullosos y muy contentos», comentaba el presidente del CNA, Óscar Estellers.
Sólo los comentarios de la televisión rompían el de los jóvenes regatistas que se han citado en el club para seguir la regata decisiva y mandar sus energías a Paula, a la que Estellers ha puesto en valor por su trayectoria. «Ahora estarán tristes, pero tienen que pensar que esto no es una prueba que se ha escapado por unos segundos sino que es el trabajo y el esfuerzo de muchos años», ha destacado el dirigente, que se ha deshecho en elogios hacia la deportista. «Como profesional es de las mejores del mundo, pero es aún mejor como persona. La hemos visto crecer en todas las categorías y es un diez, como toda su familia. Su hermano es monitor aquí, sus padres siempre han tenido una gran vinculación con el club y Paula es la definición de niña de club que es una fuera de serie como persona y profesional», resumía.
En la misma línea se ha pronunciado el gerente del CNA, Ferran Muniesa, que ha remarcado la capacidad de lucha de Barceló y Echegoyen pese a unas condiciones poco favorables y después de la penalización que les ha lastrado en la segunda mitad de la regata. «Es indiscutible que en el momento nos quedamos un poco chafados porque durante un momento han sido incluso plata, pero lo han dado todo y lo han hecho fantástico», resumía. «Seguramente en unas horas estaremos mucho mejor y celebrándolo, pero hay que valorar que Paula, con 20 y pocos años, es campeona del mundo y cuarta en unos Juegos».
Tras un fin de semana repleto de éxitos internacionales en las categorías inferiores para la vela balear en general y para el CNA en particular, Muniesa deja claro que Paula Barceló es «el espejo» en el que tienen que mirarse los jóvenes. «Es un ejemplo para nosotros porque ayuda y colabora con el club en todo lo que puede y como persona le queda nada para ser médico, así que sin duda es un ejemplo perfecto para nosotros», ha concluido.