El delantero ucraniano Roman Zozulya, que ha estado durante el mes de febrero en Sevilla ejercitándose con el Betis a la espera de solucionar su frustrada cesión al Rayo, debe incorporarse este miércoles 1 de marzo a la dinámica de trabajo del conjunto vallecano y ponerse a las ordenes de Míchel.
El 28 de febrero expiraba el plazo que el Rayo dio al jugador para que se quedara entrenando con el Betis a la espera de solucionar su futuro deportivo y el conjunto madrileño ha comunicado que no prorrogará ese tiempo, por lo que Zozulya se deberá incorporar al equipo madrileño de manera inminente. De esta forma, el jugador ucraniano deberá incorporarse a la dinámica de sus nuevos compañeros del Rayo desde el miércoles 1 de marzo.
El próximo entrenamiento que tiene previsto realizar el equipo madrileño es el miércoles, a puerta cerrada, a partir de las 10.30 horas, en el estadio de Vallecas.
Zozulya llegó al Rayo Vallecano al cierre del mercado de invierno, cedido por el Betis, pero apenas unas horas después decidió regresar a Sevilla ante las protestas de gran parte de la afición rayista, que lo acusa de tener ideas neonazis.
El jugador, cuando acudió en su primer día a las oficinas de la Ciudad Deportiva del Rayo, fue recibido con insultos por parte de algunos aficionados, que también portaron pancartas en contra del ucraniano.
Ante la gravedad del caso, Javier Tebas, presidente de LaLiga; Raúl Martín Presa, presidente del Rayo; Luis Rubiales, presidente de AFE y dos abogados, uno del departamento de integración del sindicato, se reunieron para abordar el tema.
En esa reunión se acordó garantizar la «seguridad plena» para que Roman Zozulya pudiera jugar en el Rayo, una decisión que el futbolista ucraniano decidió «libremente» si la aceptaba o volvía al Betis, con el que ha estado entrenando todo el mes de febrero aunque sin poder competir.
Durante este tiempo, Zozulya ha estado intentando regresar a Ucrania, al Dnipro, pero el problema radica en que ese equipo se encuentra sancionado sin fichar por la UEFA debido a sus deudas. Ahora, la vía que intenta agotar el jugador es la de incorporarse a un equipo que comience el campeonato para poder ser inscrito por cuarta vez en una misma temporada.