PALMER ALMA MEDITERRÁNEA PALMA 78
BÀSQUET GIRONA 73
Palmer Alma Mediterránea Palma (26+15+20+17): Pol Figueras (17), Joan Feliu (5), Robert Cosialls (4), Elijah Brown (17), Tomas Pavelka (6), -cinco inicial- Wesley Van Beck (12), Kostas Kostadinov (17) y Marc Peñarroya (0).
Bàsquet Girona (24+16+14+19): Fjellerup (4), Franch (0), Marc Gasol (27), Jawara (11), Urtasun (9), -cinco inicial- Sabat (10), Bonde (0), Vila (6), Vecvagars (0), Sorolla (4) y Sevillano (2).
Árbitros: Lucas de Lucas, Carrera Rosdevall y Ortiz Jaén. Eliminaron por cinco faltas personales a Cosialls.
Incidencias: Palau d'Esports de Son Moix. Unos 3.800 aficionados, casi lleno. Se homenajeó a Marc Gasol por parte de la FBIB y el Bahía San Agustín.
El Palmer Alma Mediterránea Palma logró una victoria de leyenda (78-73), un triunfo ante el Girona de un Marc Gasol que capitalizó la atención de un Son Moix que rozó el lleno para ver a todo un campeón del mundo y la NBA y que acabó en pie celebrando un resultado que da alas a los isleños en la pelea por la permanencia en la LEB Oro.
Bajo el foco de Marc Gasol (27 puntos, 9 rebotes y 3 asistencias), el Palmer Palma se fue sacudiendo la presión en un arranque en el que le perdió el respeto a la leyenda para abrir una pequeña brecha de la mano de Brown y Pol Figueras (8-3). El trabajo defensivo del omnipresente Joan Feliu secaba a los exteriores del Girona, cargando la complicada mision de frenar al jugador-presidente del equipo catalán sobre Pavelka y Cosialls si se terciaba. Pero la calidad de un campeón de la NBA marca las diferencias en la LEB Oro y el mediano de los Gasol se erigió en sustento ofensivo de los suyos, llevándoles a tomar la iniciativa merced a ocho puntos seguidos del internacional, que colocaron el 12-17 en el electrónico de un Son Moix que vibraba con su presencia y con el empuje del Palmer.
La entrada en pista de Van Beck dio otro aire a los palmesanos, más sueltos en el perímetro y que encontraban en la velocidad de Feliu y las ganas de Kostadinov dos argumentos para pasar por delante del Girona y cerrar el primer cuarto por delante (26-24). Kostadinov se creció y abanderó un 7-0 de salida que, cerrado con un triple de Van Beck, dio una máxima de nueve al Palmer Palma (33-24), que sacó partido de la ausencia de Marc Gasol para presentar sus credenciales.
Pero volvió el 33 del Girona. Y lo hizo para abanderar la remontada. Un parcial de 2-10, con ocho puntos suyos y dos triples providenciales, metieron de nuevo al Girona en el partido (35-34), aunque un desatado Kostadinov quiso marcar distancias de nuevo (40-34) para entrar en una espiral de tiros libres que condujo al ecuador de un duelo en el que todo estaba por decidir, un intermedio en el que los de Pau Tomàs y Álex Pérez supieron mantenerse al mando (41-40), pese a los 20 puntos de Marc Gasol.
No le perdió la cara al partido el Palmer, que regresó a la pista acelerado, y con dos triples de Kostadinov y Brown (47-42) lanzó una seria advertencia a un Girona perdido y encomendado a su estrella. Entre medias, el Palma hacía su camino para recuperar margen y ponerse diez arriba (55-45, min. 25). Fue a más la cosa, llegando a un techo de doce para el Palmer (61-49), aunque en el minuto y medio final del tercer acto, el Girona lo arregló con Vila al frente y cinco puntos suyos que reengancharon a los catalanes (61-54, min 30).
Pintaba bien la cosa para un Palmer que no imaginaba un escenario así. Pero el Girona se guardaba su arma letal para el momento clave. Eso sí, quien golpeó primero fue el Palma, con Pavelka volando para machacar, palmear y taponar las esperanzas de un rival en estado crítico sin Mar Gasol en pista (65-54) y que acumulaba tres minutos sin anotar. Sargatal no lo dudó y llamó al 33 para volver cuando todavía tenían tiempo para paliar errores.
Van Beck desatascó al Palmer con un triple vital (69-58, a 4:08) y al Girona le quedaba el recurso de poner balones a Marc Gasol, que cargó de faltas a los rivales y se erigió en el único recurso en ataque de los catalanes, a los que se les escapaba el partido, aunque tenían claro cuál era todavía su carta ganadora. Pero fueron los tiros libres los que devolvieron al partido al cuadro visitante, y entre Sabat y Jawara llenaron de incertidumbre a un Son Moix que disfrutaba de la presencia de Marc Gasol, pero quería que la victoria se quedara en casa, aunque no iba a ser fácil (69-66, a 1:51).
Pol Figueras dio aire (71-66), pero un triple de Urtarsun elevó las pulsaciones y un tapón de Marc Gasol a Kostadinov dio paso a dos puntos de Jawara que igualaron el duelo (71-71, a 57 segundos). Ardía el Palau ante la posibilidad de consumar la gesta, y más cuando dos tiros libres anotados por Brown devolvían la ventaja al Palmer, a apenas 36 segundos del final (73-71). Urtasun devolvió el golpe para empatar a 27 segundos, pero un triple de Pol Figueras provocó el delirio a 6 segundos y dos décimas (76-73). Sabat erró dos tiros libres vitales y en un desenlace de vértigo, Brown rubricó la octava victoria (78-73). Nada menos que ante Marc Gasol y su Girona.