El Atlético Baleares ha presentado este sábado, a través de sus redes sociales, la campaña de abonados para la temporada 2022-23. El club blanquiazul, que estará integrado en el Grupo 2 de Primera RFEF, ya conoce el calendario que le tocará recorrer durante el curso y parte otra vez como uno de los grandes aspirantes al ascenso de categoría. La gran novedad de este verano es que la propiedad, encabezada por el alemán Ingo Volckmann, ha decidido mantener congelados los precios para sus seguidores.
La campaña nace bajo el lema Disfrutam y espera reunir al máximo número de aficionados en torno a un Estadi Balear que está cada vez más próximo al final de su reforma. Los precios para las renovaciones de los abonos irán de los 80 euros de los fondos a los 185 de Preferente, mientras que las nuevas altas podrán sumarse a la causa blanquiazul por un precio que oscilará entre los 90 y los 230 euros. Unas cantidades en las que no se incluyen los posibles partidos del playoffs de ascenso ni los de Copa del Rey. A su vez, el ATB se reserva la opción de declarar hasta dos encuentros como día del club durante la temporada En cuanto a los plazos, los abonados podrán renovar sus carnets entre los días 25 de julio y 5 de agosto, mientras que los nuevos socios podrán darse de alta a partir del 22 de agosto.
El Atlético Baleares disputará el primer partido de la temporada en Tajonar, contra el filial de Osasuna, el próximo 28 de agosto y debutarán en casa el 4 de septiembre frente al Real Unión de Irún para repetir una semana más tarde contra el Castellón. El equipo de Jordi Roger regresó esta semana a los entrenamientos con cinco caras nuevas para empezar a preparar un curso en el que el nivel de exigencia volverá a incrementarse.