Activar el modo avión en nuestros dispositivos móviles durante los vuelos no es solo una recomendación, sino una medida crucial para garantizar la seguridad aérea. Así lo explica Perico Durán, un experimentado piloto español que destaca la importancia de cumplir con esta norma, especialmente durante las fases más críticas del vuelo: despegues y aterrizajes.
La prioridad: evitar distracciones
Según Durán, en las etapas cercanas al suelo, las tripulaciones aplican el protocolo de «cabina estéril», que implica mantener la máxima concentración y evitar cualquier distracción. Los dispositivos electrónicos encendidos pueden generar interferencias que provoquen alarmas falsas, añadiendo complicaciones innecesarias en momentos delicados.
En aproximaciones sin visibilidad, los sistemas de navegación de las aeronaves dependen de una precisión y fiabilidad absolutas. Por ello, es fundamental contar con un entorno libre de interferencias para minimizar la posibilidad de fallos técnicos. Aunque los aviones están diseñados para ser extremadamente seguros, en la aviación se toman todas las medidas posibles para reducir los riesgos al máximo.
Consecuencias de no cumplir la norma
No activar el modo avión no solo supone un riesgo para la seguridad del vuelo, sino que también podría provocar aproximaciones frustradas o desvíos, afectando a todos los pasajeros a bordo. Además, el incumplimiento de esta norma implica una falta de respeto hacia el resto de viajeros, especialmente aquellos que sufren miedo a volar, y hacia la tripulación, que en estas fases críticas debería estar concentrada en garantizar que todo transcurra de forma segura y tranquila para todos.
Helver GallargaQuí és el fake açí? En Perico o en Helver?