El cambio de hora ha llegado acompañado de una bajada de las temperaturas, lo que recuerda que es el momento de preparar el armario para esta nueva época. A veces, puede resultar complicado encontrar el momento ideal para hacer esta transición, en la que se sustituyen las sandalias por las botas. De hecho, esta tarea puede ser tediosa si no se aborda de manera efectiva. Para facilitar el proceso, te ayudamos a descubrir cuáles son las prendas de ropa que se pueden mantener durante todo el año en el guardarropa.
En primer lugar, hay que recordar que hay piezas en el armario que se llevan los 12 meses del año, estas se conocen como fondo de armario. Algunos ejemplos de prendas atemporales son camisetas básicas de manga corta, que pueden hacer de camiseta interior en los días más fríos. Otras son los pantalones vaqueros y los tipo sastre en algodón. Además, se pueden incluir algunos cárdigan finos que se utilizan durante las noches más frescas de verano, igual que las camisas de popelín.
Por otro lado, los accesorios se caracterizan por ser atemporales, ya que nunca pasan de moda y pueden transformar cualquier look. Especialmente los cinturones, los pañuelos de seda o cachemir y las gafas de sol, que siempre aportan un toque especial. Por ello, puede resultar muy útil mantener estos complementos en el mismo espacio durante todo el año, ya sea un cajón o una caja por separado. De esta forma, estarán a mano independientemente de la temperatura que haga en el exterior.
Otra sección del vestidor que se puede mantener durante las cuatro estaciones es, sin duda, la ropa de deporte. Esto se debe a que, independientemente de la época del año, la práctica de actividades físicas provoca un aumento en la temperatura corporal. Las prendas técnicas diseñadas para el deporte están confeccionadas con materiales que permiten la transpiración y el manejo de la humedad, lo que las hace ideales para cualquier clima. Esta versatilidad en su uso permite que se mantengan en un armario funcional y práctico, sin importar la temporada.
Por último, para logar un cambio de armario funcional, en el que no hay que vaciar todos los cajones cada vez que varía la temperatura, tan solo hay que mantener un elemento más: los bolsos y las mochilas. Estas piezas son, en su mayoría, útiles durante todo el año, ya que se adaptan a diferentes ocasiones y necesidades. Un buen bolso puede ser el complemento perfecto para un look de oficina en primavera, mientras que una mochila resistente es ideal para excursiones en verano o para llevar al gimnasio en invierno.