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En forma sin perder el ritmo

Las últimas semanas antes de que arranque el verano se multiplica el trabajo para los ‘personal trainers'

Javier Bernal, atendiendo a dos de sus alumnas. | Julián Aguirre

| Palma |

Arranca la cuenta atrás para quienes quieren presumir de estar en forma y de un cuerpo envidiable este verano. Los personal trainers o entrenadores personales reciben una avalancha de peticiones para marcar músculo o eliminar esos kilos de más que se han acumulado durante el invierno. Gonzalo López-Cancio se dedica desde 2013 al mundo del entrenamiento personal, «lo hago por la satisfacción de ayudar a la gente a conseguir sus objetivos y/o formar parte de sus metas personales de salud y bienestar», asegura. Lo que más solicita la gente a la mayoría de entrenadores es «estar más fuertes y enérgicos, así como bajar peso y mejorar la autoestima», comenta Gonzalo mientras entrena a tres de sus pupilos.

Paula Noriega es una docente que a sus 59 años, y tras 12 años entrenando con Gonzalo, afirma que «he recuperado elasticidad, mis índices de grasa son los correctos, mi peso el adecuado y mi musculatura está por encima de mi edad». Daniel Martí, de 47 años, pasa gran parte del día sentado. «Soy administrativo y desde hace ocho años entreno con Gonzalo pues en el gimnasio ni era constante ni ejercitaba como tenía que hacerlo, en cambio con él es diferente». Para Sebastián Mercadal, técnico de coche, el motivo por el que desde hace tres años entrena con Gonzalo es «porque quería opositar para militar, pero ahora sigo entrenando por salud, y sin duda he conseguido objetivos».

Parques, plazas y playas son los escenarios estos días de los personal trainers para reunir a sus alumnos. En el polígono Son Morro, el entrenador personal Javier Bernal despliega mancuernas, pesas, esterillas, etc para una sesión grupal. «Lo que más pide la gente es perder peso, a veces por trastornos de ansiedad y alimentarios. La verdad es que esta es la época del año en la que la gente demanda ponerse más en forma porque se acerca el verano, nos desprendemos de la ropa de invierno, y se comparan mucho con lo que ven alrededor, y las redes sociales hacen mucho daño mostrando cánones de belleza que no son reales, de cuerpos perfectos, porque la gente demanda ese estereotipo». Javier ofrece un cambio integral, a nivel mental y nutricional. Crea buenos hábitos en torno al deporte y una vida saludable.

Dos deportistas, en plena acción. Foto: Julián Aguirre

Mercedes Aguilera, a sus 40 años de edad, comenzó a entrenar el pasado mes de noviembre por prescripción médica a causa de un hipotiroidismo. «He adelgazado nueve kilos y he notado mayor fuerza, además controlo más la alimentación», comenta Mercedes. Nadia Agüero sólo lleva un mes y medio entrenando: «Soy camarera de piso en un hotel y esto me hace bien para el día a día, sobre todo para reforzar la espalda». El grupo de Bernal cuenta con bastantes alumnos veteranos, que llevan entrenando con él varios años. «Nos hicimos una camiseta con el lema ‘No hay excusas en mi calendario', porque es lo que siempre nos dice cuando intentamos evitar algún entrenamiento», comenta uno de los alumnos.

Gonzalo López-Cancio, dirigiendo un ejercicio. Foto: Julián Aguirre

Quienes han acudido para emprender la ‘operación verano' son Mariela y Valentina, madre e hija, que desde hace un mes se están poniendo en forma. Al igual que su amiga Loli Ribas, que sólo lleva una semana, se quejan de las agujetas. Una sensación contradictoria de dolor y satisfacción. Entre tres y cuatro veces a la semana entrena la visitadora médico Victoria Aguiló, que a sus 55 años está en muy buena forma. «Intento sacar tiempo de donde no hay, pero merece la pena hacer ese esfuerzo. Es cierto que en invierno entrenar al aire libre da más pereza, pero la constancia es el secreto para obtener buenos resultados», comenta. Diferentes edades, distintas profesiones e incluso diversos motivos llevan a estas personas a ejercitarse con entrenadores personales, quienes destacan el buen ambiente y nuevas amistades.

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