El consumo de croquetas creció un 9,4% el pasado año en España, lo que le confirma como uno de los platos más populares y demandados de la gastronomía española, según los datos ofrecidos por la Asociación Española de Fabricantes de Platos Preparados (Asefapre).
En concreto, el estudio, que coincide con la celebración el próximo sábado del 'Día Mundial de la Croqueta', refleja la popularidad de este plato que en 2020, un año marcado por el coronavirus, experimentó un importante aumento del volumen de toneladas vendidas únicamente en el sector hogar de la distribución organizada, llegando a alcanzar las 14.691 toneladas en 2020, frente a las 13.393 de 2019, lo que supone un 9,6% más.
El informe muestra que las croquetas siguen siendo una opción ideal para las cenas en familia o con amigos, ya que poseen una inmensidad de variedades que se adaptan a prácticamente todos los gustos.
De esta forma, una de las bases de su popularidad radica precisamente en su amplia y diversa capacidad de innovación. Así, si el año pasado el sector sorprendía con la introducción de variedades elaboradas a base de superalimentos como la espirulina y la guaraná, este año tambiénse apunta a las últimas tendencias de desarrollo de productos 'plant-based' o elaborados 100% a base de productos vegetales, un mercado cada vez más en alza.
El secretario general de Asefapre, Álvaro Aguilar, ha indicado que este sector «cuenta con un amplio abanico de soluciones que permiten dar una respuesta a los diferentes gustos y necesidades de los consumidores, lo que favorece la innovación del sector a través de la identificación de nuevas materias primas e ingredientes, innovadoras formulaciones onuevos procesos de elaboración».
La industria ofrece a los consumidores una amplia variedad de sabores, desde las clásicas de jamón, pescado o cocido, el sector también se ocupa de desarrollar productos adaptados a las diferentes necesidades de los consumidores, elaborando variedades sin gluten o sin lactosa.