Un año más, Marta Robles (Madrid, 1963) disfruta de sus vacaciones veraniegas junto a su familia en su casa de Mallorca, en la Costa dels Pins. La presentadora de radio, televisión, periodista y escritora –con nueve libros publicados– es ahora también empresaria, ya que recientemente ha impulsado como directora y editora una revista. Robles, además, ha compartido trabajo con Jesús Hermida, Javier Capitán, Nativel Preciado, Carlos Herrera, Iñaki Gabilondo, Pedro Piqueras…
Nos reunimos en su casa, lo que asegura es una excepción, pues es muy celosa de su intimidad. Marta está casada con Luis Martín de Bustamante, destacado ingeniero de telecomunicaciones, con quien tiene dos hijos. Anteriormente, lo estuvo con el actor de teatro, cine y televisión, Ramón Langa, cuya voz es la que escuchamos en el doblaje en español de las películas de Bruce Willis.
—Sorprende que alguien como usted haya elegido un lugar como este para las vacaciones...
—La respuesta está en que no estoy en absoluto interesada en el show out, que es lo que encontraría en otros sitios. Este rincón de Mallorca me ofrece tranquilidad para sentirme a gusto con mi familia y algunos buenos amigos.
—¿Qué síntesis haría de los destacados profesionales con quienes ha trabajado?
—Hermida imponía su sello; Herrera establece el tono. Piqueras es un creador de equipo; Capitán, un tipo muy divertido; Gabilondo, un buen amigo. Pero quiero reconocer que quien más me ayudó y apoyó fue Nativel Preciado. Aprendí de todos pero nunca perdí mi personalidad, que quienes me tratan dicen que es, a veces, fuerte como mi apellido.
—Ha cambiado mucho de lugares de trabajo. ¿Tal vez por su carácter?
—Creo que un periodista ambicioso debe huir de la rutina y la comodidad y arriesgarse en otros medios con ideas diversas.
—En sus numerosos programas de radio en cadenas como la SER, Radio Intercontinental, Onda Cero, Efe Radio... ha entrevistado a muchos famosos. ¿Qué impresión le produjeron?
—Para no citar nombres diré que algunos que creía que eran ‘extraordinarios' me decepcionaron y otros que aparecían como tipos sencillos, me encantaron. Hay quienes no son lo que aparentan.
—Cuénteme algo de su revista.
—Es una publicación on line. Se titula Mass Bienestar. Consta de 150 páginas con noticias, literatura, arte, deportes y su propósito fundamental es ayudar a sus lectores a estar mejor por dentro y por fuera. Por cierto, la suscripción a la misma es gratuita.
—El pasado año estaba usted en plena promoción de su último libro «Luisa y los espejos», una novela que ganó el Premio Fernando Lara.
—Sigo promocionándolo. Los libros necesitan apoyo constante pues, como usted sabe, no es fácil venderlos.
—Parece usted muy segura de sí misma...
—Soy afortunada, ya que desde los 18 años he conseguido vivir haciendo lo que me gusta. Pero también soy consciente de que jamás hay algo lineal en la trayectoria de un escritor y que si, como suele afirmarse, la vida tiene dientes de sierra, en la profesión periodística están más afilados.
—¿Una mala crítica puede perjudicar a un libro?
—No, si el libro es bueno.
—¿Algo nuevo en perspectiva?
—Sí, pero no le voy a contar nada sobre ello.