El cineasta español Pedro Almodóvar fue reconocido anoche por el Museo de Arte Moderno (MoMA) de Nueva York que subrayó su trayectoria artística internacional y que celebró con una gala benéfica a la que asistieron numerosas celebridades del mundo del cine.
El realizador español, ganador de dos premios Oscar por sus películas «Todo sobre mi madre» (1999) y «Hable con ella» (2002), protagonizó así la cuarta edición de la gala benéfica del museo, que contó con la presencia de la actriz Elena Anaya, protagonista de su última película, «La piel que habito».
«Estoy muy emocionado. Hace 28 años que pusieron aquí (en el MoMA) por primera vez una película mía. Me siento muy orgulloso de que me descubrieran... Es maravilloso estar aquí», dijo Almodóvar.
El director de cine español, nacido hace 62 años en la localidad castellano-manchega de Calzada de Calatrava, destacó también los mensajes de vídeo enviados por Penélope Cruz y Antonio Banderas, dos de sus actores preferidos que debían copresentar el evento pero no pudieron trasladarse a Nueva York por motivos de trabajo.
«No sabía que no iban a venir. Son los actores que aquí más conocen, y de alguna manera era natural que fueran ellos. Me he emocionado mucho», dijo el cineasta sobre las palabras de cariño, amistad y respeto que Banderas y Cruz le dirigieron.
«Es un artista en lo más alto de la cima, asumiendo riesgos y dispuesto a cambiar de dirección. El resultado es un trabajo extraordinario y muy maduro», declaró el conservador jefe del departamento de cine del MoMA, Rajendra Roy, que subrayó que también quisieron celebrar «al artista e innovador».
Roy agregó que el cineasta español se adecuaba al perfil de otros directores a los que el MoMA ha premiado en años anteriores, y que Almodóvar «encaja perfectamente» por su vinculación al museo y a Nueva York, en donde -desde su debut en EE.UU. en 1984 con «¿Qué he hecho yo para merecer esto?"- sus películas han sido proyectadas en varias ocasiones.
Almodóvar se suma así a otros cineastas como Kathryn Bigelow ("The Hurt Locker», «Near Dark") que recibió ese reconocimiento del museo en 2010, Tim Burton ("Beetlejuice», «Edward Scissorhand», «Alice in Wonderland") y el australiano Baz Luhrmann ("Moulin Rouge», «Australia"), que lo fueron en 2009 y 2008, respectivamente.
Respecto a las que puedan ser las mejores cintas de Almodóvar, el experto del MoMA señaló que «seguro que la respuesta es diferente en Estados Unidos que en España».
Dijo que «¿Qué he hecho yo para merecer esto?», «La ley del deseo» y «Matador» son «una prueba temprana de su talento y de su capacidad de arriesgar. Otras como «Mujeres al borde de un ataque de nervios» o «Átame» se consideran cruciales para Estados Unidos, mientras que sus Oscar por «Todo sobre mi madre» y «Hable con ella» confirman su estatus como director internacional de gran talla».
Almodóvar con su última película, «La piel que habito» -que llegó a las pantallas estadounidenses hace apenas un mes- «volvió a demostrar que es un genio de la innovación», consideró Roy, que no descarta organizar en el futuro una retrospectiva de toda su obra.
El director de cine español cuenta en su haber con casi una veintena de cintas desde el estreno en 1980 de «Pepi, Luci, Bom y otras chicas del montón».
El MoMA ha exhibido en sus ciclos de cine algunas de las películas del cineasta español, como «Mujeres al borde de un ataque de nervios» o «Átame».
Al evento asistieron destacadas celebridades como el modisto Karl Lagerfeld o la directora de la revista «Vogue», Anna Wintour, al igual que la diseñadora Diana Von Furstenberg, artistas como Alicia Keys, Drew Barrymore, Jessica Hart, Blake Lively, Sarah Jessica Parker, Lili Sobieski, Emma Stone o Uma Thurman, entre otros.
«Cada plano de sus películas es magia. Es único. No necesita 1000 millones para hacer una película. Es el Woody Allen español», dijo la editora de Vogue, mientras que otra de las asistentes, Sarah Jessicah Parker, destacó el talento del director y «lo merecido que es este premio para él. Todas sus películas me gustan».
Por su parte, Elena Anaya señaló que para ella era «un honor acompañar a Pedro en este tributo tan merecido. Para mí es un cierre de oro, hacer esta película con él y que le rindan un tributo, es maravilloso. Es muy justo».
Rossy de Palma señaló que era «muy gratificante y un homenaje merecidísimo. Es un gustazo acompañarlo», al tiempo que subrayó que el reconocimiento pone de manifiesto los lazos que unen al cineasta español con Nueva York.
De esa conexión con Nueva York, el experto del MoMA destacó que «Pedro siempre ha celebrado en sus películas a los desconocidos, los desamparados y los apasionados. Creo que no hay mejor sitio para celebrarle a él y a su trabajo que la ciudad de las oportunidades y la diversidad que es Nueva York».
Almodóvar debutó en el festival de cine de Nueva York en 1988 con «Mujeres al borde de un ataque de nervios», a la que siguieron después «La flor de mi secreto» (1995), «Carne trémula» (1997), «Todo sobre mi madre» (1999), «Hable con ella» (2002), «La mala educación» (2004), «Volver» (2006), «Los abrazos rotos» (2009) y «La piel que habito».