Después de que las lluvias a mediodía, al final todo salió muy bien en las bodegas rodeados de viñas donde se celebró un año más el tradicional sopar de Es Vermar de las Bodegas Ferrer. La cita era a las 8 frente a la fachada de la bodega con un aperitivo y Veritas Brut Nature para refrescarlo de lujo y luego, tras los encuentros y charlas amistosas, nos sentamos y comimos botifarró, llonganissa, queso, uvas recién vendimiadas y los tradicionales y maravillosos fideus des vermar de la cocinera de la casa, María Beltrán, que deja a todos extasiados y más maridados con mágnums de Crianza, de Veritas Blanc y Pedra de Binissalem Rosat.
Tras la cena se bailó en la verbena, pero de las verbenas de toda la vida que esta familia de toda la vida, la familia Roses, quiere agradecer tanto a la familia de Franja Roja, los trabajadores que durante todo el año y más intensamente en vendimia, miman las uvas y los vinos para que los mallorquines los disfruten en sus mesas. Este año quisieron agradecer también a todos los clientes que en tiempos difíciles no han dejado de trabajar y confiar en los vinos de esta bodega casi centenaria de Binissalem.