Concha Calvo y sus hijos vivieron uno de sus días más emotivos rodeados de muchos amigos mallorquines que les acompañaron sin dudarlo para homenajear al artista Antonio Calvo Carrión, en la que fue su tierra natal. Concha ha querido volver a la tierra de sus ancestros y recuperar orígenes, aromas y acentos, como señora que es de esa tierra donde el arte brota como si nada.
Por cierto, me he enterado de que su hija María Buades se casa, así que enhorabuena. El grupo, de sobra conocido que ven en las fotos, lo pasó en grande y no es para menos. Sevilla siempre es Sevilla, y la Algaba, pueblo del artista, es mucha Algaba.