Lujo llama a lujo, de la misma manera que dinero llama a dinero, y no solo porque sea una ley casi fundamental, sino porque el estatus social y hasta cultural se mide por el buen gusto de una embarcación y el cuidado que se tenga de ella. Daba gloria ver a todas esas personalidades deambulando de un stand a otro mientras decidían a qué barco subir para admirarlo y quizás darse el capricho. Se vio champán del bueno, vino mallorquín a gogó, canapés de lujo y a mucha gente bella en la que ha sido quizás la más concurrida de las ferias náuticas hasta la fecha. Se habla de hasta 25.000 personas admirando el lujo hecho por y para el mar, que es el que nos rodea. No hay forma de desligarnos de él, es nuestra vida y nuestra cultura y precisamente por eso hay que defender acciones como esta que no generan más que beneficios para todos.
El mar es nuestro pasado, presente y futuro, tanto que ya hay quien compara el éxito conseguido con el de la feria de Mónaco o con la que antes se vivía en Barcelona con la Feria Náutica, donde nunca faltaba el rey don Juan Carlos, allá por los gloriosos años 80. No todo fueron negocios y cifras que maravillan, también se ha presentado la Vuelta a Mallorca a nado a beneficio de Aspanob en el marco del Palma International Boat Show, que es el nuevo reto del nadador Alberto Lorente, que intentará dar la vuelta a Mallorca a nado a beneficio de los padres de niños y niñas con cáncer de Balears.
Junto a él, un gran grupo de voluntarios, cada uno experto en su disciplina, animarán al nadador a llevar a cabo este reto. La Vuelta a Mallorca a nado saldrá desde el Club Náutico del Arenal, y se parará en los diferentes puertos de la Isla que sean necesarios dependiendo de las condiciones del nadador, la logística y las condiciones meteorológicas. Alberto Lorente es conocido como 'el hombre de las Aguas'. ¿No les parece precioso…?