Cada vez que Palma, o cualquier pueblo de Mallorca, es testigo de la inauguración de un nuevo negocio deberían lanzarse fuegos artificiales. El último gran acontecimiento fue la inauguración del restaurante Pino, en plena Plaza Mayor, con la presencia de sus propietarios, que han hecho de esta empresa familiar una gran compañía con más de 800 empleados que desde Sydney a Europa, Ibiza, Palma e Italia, muestran lo que es la verdadera cocina mediterránea. Originarios de Nápoles, no se han limitado únicamente a la cocina italiana, aunque su pasta es, se lo digo yo que la he probado con ansia, insuperable.
La pasta es sagrada, recién hecha y para más inri la causante de que en el país vecino sea la base de una comida saludable. No se pierdan las croquetas del chef, que son la cosa más rica que he probado en años, y si pueden conózcanlo, y disfruten sus delicias. El restaurante Pino ha elegido Palma porque es una ciudad de verdad, Ibiza es una isla, Palma es la ciudad que todos buscan durante el año. No se lo pierdan porque hasta el chuletón o el pulpo a la gallega son lo más.
La Plaza Mayor representa a la de Madrid, y está en todas las ciudades españolas, hay que ponerla en valor y lo hace esta familia que se hace llamar Grupo Pino. En todos los restaurantes hay alguien que pertenece a la familia, así son los napolitanos. La inauguración fue fantástica y mostró a qué tipo de público se dirige, con vino español y gente capaz de valorar la buena cocina. Y acabo cerca del mar.