La mujer, víctima de la presunta agresión sexual que se denunció el pasado 30 de abril ante los agentes de la Guardia Civil de Calvià, «se encuentra tranquila», como explicó su hija ante el cuartel; aunque ahora deberá pasar ahora por un largo proceso de investigación que pretende dirimir si la violación tuvo lugar y de qué forma ocurrió; ya que según el testimonio de la anciana, alguien la agredió de noche, entre los días 14 y 30 de abril, período que pasó en la residencia alojada porque su familia estaba de viaje.
Los agentes de la Benemérita prosiguen con la investigación y uno de los puntos imprescindibles es, precisamente, la colaboración por parte del hogar de mayores; que tras saltar durante este viernes la noticia, ya ha manifestado que se pone a disposición de los investigadores. La Policía Judicial de la Benemérita se entrevistará con todo el personal que pudo tener algún contacto con la víctima entre los días de su residencia temporal.
Asimismo, también se entrevistarán de nuevo con la afectada, en un entorno en el que se sienta segura; ya que tiene que volver a recordar el suceso que la violentó hace menos de dos semanas. Los agentes tratan de llevar las pesquisas de la forma más minuciosa posible y sin perder detalle; ya que se trata de un caso complejo. En primer lugar, todavía no ha trascendido si la presunta agresión se llevó a cabo por parte de alguien del personal, una visita o algún otro usuario de la residencia municipal.
Por otro lado, al existir una segunda denuncia por omisión del deber de socorro; los agentes también deberán investigar cuáles fueron los movimientos que se llevaron a cabo por parte de los responsables del hogar de mayores desde que ocurrieron los hechos. La familia mantiene que la víctima avisó en el momento y que, además, interpuso la denuncia el mismo 30 de abril, día en el que fue recogida por su familia. Además, critican no haber sido avisados cuando ocurrió ni haber tenido ningún tipo de contacto durante estos días.
Por su parte, según defienden desde el Ajuntament de Calvià, dicen no haber tenido constancia de ninguna denuncia y aseguran que tuvieron conocimiento de la presunta agresión a través de la Guardia Civil, cuando «la usuaria ya no se hallaba en la Llar».
Igual que hay familias que aparcan a sus mayores en hospitales y residencias para irse de vacaciones. Hay mayores que montan estos pollos para que la familia no los vuelva a dejar en estos centros en futuros viajes... No os haceis una idea de como son las familias con sus mayores y viceversa.