Guerra abierta. La Policía Local de Palma vigilará a diario el poblado gitano de Son Banya, incluso con drones, para asegurarse de que los narcotraficantes no vuelven a construir edificaciones ilegales como las que han levantado en los últimos meses. «La tolerancia con las infracciones será cero», apuntan desde el Consistorio palmesano, tras las últimas provocaciones de los traficantes.
La lucha contra el narcotráfico lleva décadas instalada en el poblado, donde los narcos son sometidos a un acoso constante por parte de la Policía Nacional y la Guardia Civil. Sin embargo, ahora se añade un nuevo frente: el administrativo. Una fuente policial explicó que se está aplicando la política que se inauguró con ‘El Pablo’ en la calle Teix, en la barriada de La Soledad.
El conocido narco había construido a su antojo y sin licencias y se topó, de repente, con un aluvión de multas por infracciones urbanísticas graves. Ahora, ocurrirá lo mismo en Son Banya: «Ya no hay carta blanca», ha insistido un mando municipal. La batalla que se libra es encarnizada, porque los ocho narcos que dirigen ahora el poblado han decidido separar la parte vieja de las casas, donde residen las familias, de la nueva, donde habían levantado las edificaciones ilegales.
El pulso que los narcos han echado al alcalde Jaime Martínez cuenta con un punto débil: la economía del poblado, basada por supuesto en la venta masiva de droga, se ha resentido en solo una semana de bloqueo por las obras de demolición. Los compradores huyen al detectar policías y funcionarios en la entrada y eligen otros puntos de venta de Son Gotleu, La soledad, Corea o Son Roca. Así pues, en el caso de que los capos insistan en su intención de levantar obras ilegales, pueden encontrarse con un cordón policial permanente a las puertas del poblado. Y eso es lo último que desean.
Las fuentes policiales indican que los narcos tienen demasiados intereses y que es probable que intenten reactivar el nuevo poblado, presumiblemente en las fiestas de Semana Santa, cuando suponen que la vigilancia se relajará. Pero desde Cort advierten que esto no pasará y que cualquier obra ilegal que se ejecute será demolida de inmediato. Los narcos han lanzado el guante y Cort lo ha recogido. Ahora solo falta esperar a lo más importante: ¿Quién se impondrá en el duelo?
Autoritadutxes fent es beneit i es coió .