Un juzgado de Albacete ha llamado a declarar como investigado por un presunto homicidio imprudente a un médico del hospital Quirón Santa Cristina de la capital albaceteña, contra el que un matrimonio ha interpuesto una querella criminal por la muerte de su hija de 2 años.
La pequeña Jana murió en enero de 2023 por un shock tóxico estreptocócico provocado por una infección de estreptococo pyogenes, y sus padres sostienen que el motivo de la muerte fue la «completa dejación de funciones» por parte del médico que la atendió en primer término en Urgencias, que no le practicó ninguna prueba ni exploración, y por tanto no puso el tratamiento que podría haber salvado la vida de la niña.
Según se relata en el escrito de la querella, al que ha tenido acceso EFE, la pequeña tuvo un episodio de fiebre el 10 de enero por la noche que llegó a los 40 grados, por lo que de madrugada su madre se trasladó con ella a las Urgencias del hospital Quirón Santa Cristina, donde el médico denunciado, sin realizar «ningún tipo de exploración», le instó a seguir con la pauta de medicamentos que le estaban dando y, si no mejoraba, acudir a su pediatra el día 12.
Durante la mañana del día 11 Jana continúo con fiebre elevada hasta que la volvieron a llevar a Urgencias del mismo centro a las 15:00 horas, y desde allí fue trasladada al Hospital General de Albacete en ambulancia, donde pasadas las siete de la tarde fue derivada a la UCI pediátrica y se le diagnosticó una infección por estreptococo pyogenes. En la UCI la niña sufrió hasta cuatro paradas cardiorrespiratorias, la última de las cuales acabó con su vida a las 6:40 horas del 12 de enero.
Acusación
La representación legal de los padres de Jana ha argumentado que, en contra de lo que reflejó el médico en su informe, no le practicó a la niña ninguna exploración ni prueba, pese a que ella vomitó, tenía mucha fiebre y «no podía mantenerse de pie», y ha resaltado que la pequeña y su madre estuvieron tan solo 11 minutos en Urgencias, desde las 5:41 a las 5:52 horas.
Han añadido que «ni se consultó su historial médico, ni se realizó prueba alguna» para detectar la infección y suministrar los antibióticos precisos, una conducta que, «por negligente, ocasionó la muerte de la menor».
Asimismo, en el escrito se desgrana que el propio médico querellado había firmado un artículo en 2018 sobre la infección por este tipo de bacterias, y que un mes antes de la muerte de Jana la Sociedad Española de Infectología Pediátrica lanzó una alerta sobre infecciones graves por estreptococo pyogenes que recomendaba «mantener una elevada alerta y sospecha ante la posibilidad de casos graves de infección».
Cita también el manual de protocolos de la Consejería de Sanidad, en el que ante la alta temperatura y los vómitos se aconseja extraer hemocultivos, o al menos «se debería haber hecho una prueba rápida de estreptococo, lo que hubiera bastado para determinar que la causa de la enfermedad era bacteriana» y se habría tratado con antibióticos.
«No hizo nada por mi hija»
Tamara, la madre de Jana, ha calificado de «desprecio» la actitud del facultativo aquella madrugada: «Me preguntó si yo veía mal a mi hija con 38,8 grados, y yo le expliqué que sí estaba mal, que no estaba como en otras ocasiones en las que también había tenido fiebre alta».
La mujer ha asegurado que admira a los médicos porque «tienen un trabajo muy complicado», y ha añadido: «Admiro y respeto incluso a los que tienen fallos porque fallos los cometemos todos; pero para cometer un fallo hay que hacer algo, y este médico no hizo nada... No hizo nada por mi hija».
En una conversación con EFE, Tamara ha explicado que ella y su marido, Juan Antonio, decidieron optar por la vía penal pese a las dificultades que han encontrado para ello pues ha afirmado que no fue «una negligencia médica como tal, no fue un fallo; para nosotros es una omisión porque no cumplió con su deber; es una dejadez de funciones completa».
Ha afirmado: «No busco justicia, porque la justicia no me va a devolver a mi hija; ni tampoco venganza, porque no soy vengativa (...) Lo que busco es que esta persona, que no ama su profesión, no puede estar con niños, no puede estar tratando niños... No quiero que esto le pueda volver a pasar a ningún niño más».
Tamara ha reconocido la importancia del paso que supone que el médico haya sido llamado a declarar por homicidio imprudente, y ha avanzado que realizarán una concentración el día de la declaración a la puerta de los juzgados para que «se sepa lo que pasó con Jana».
Declaración en el juzgado
El Juzgado de Instrucción número 2 de Albacete tomará declaración al médico, en calidad de investigado, el próximo miércoles, día 13 a las 11:00 horas.
Según han confirmado a EFE desde el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha, la investigación está en una fase inicial y las diligencias previas se abren para «investigar la posible comisión de un delito de homicidio imprudente».
El abogado que representa a la familia, Mariano López, ha explicado que la declaración servirá también para ratificar el perito médico cuyo informe presentaron con la querella el pasado 8 de enero.
Por su parte, desde el centro hospitalario Quirón Santa Cristina han indicado a EFE que, por protocolo, no realizan declaraciones sobre asuntos que estén en trámite judicial.