El español fallecido hoy con su familia (esposa y tres hijos) en un accidente de helicóptero en Nueva York es Agustín Escobar, un directivo de la compañía Siemens en España, según ha adelantado la prensa local citando a fuentes policiales.
La embajada española en Estados Unidos, contactada por EFE, no quiso precisar esos detalles y confirmó únicamente que había cinco muertos de nacionalidad española. Agustín E. fue nombrado responsable de la división de movilidad ferroviaria en Siemens el pasado diciembre, después de haber ocupado el puesto de CEO de Siemens España durante dos años.
Le acompañaban en el vuelo su esposa, Mercè Camprubí Montal, directiva también en Siemens Energy y con una sólida carrera internacional en el sector energético. Según su perfil de LinkedIn, trabajó en Nueva York entre 2011 y 2013 y, en la actualidad, ocupaba la dirección de Comercialización Global en la multinacional. Era hermana de Joan Camprubí Montal, que en octubre de 2024 presentó su candidatura para presidir el FC Barcelona. La familia residía en Barcelona.
Por su parte, New York Helicopters Tours, empresa que organizadora de viajes turísticos en helicóptero, tenía posteadas esta misma tarde unas fotografías de la familia momentos antes de subirse en la aeronave de color blanco donde iban a encontrar la muerte. Aparecen sonrientes posando ante las cámaras de la propia empresa turística, en lo que parece una práctica habitual de esta empresa.
Las cámaras de muchos testigos captaron la secuencia completa y lo difundían después en las redes sociales: el helicóptero se descomponía en el aire antes de impactar contra el agua. Cuatro de los ocupantes murieron en el acto; otros dos fallecieron después, en el traslado al hospital, después de haberlos rescatado.
Otra tragedia aérea en EE. UU. Desde que Trump asumió la presidencia, dio luz verde a Elon Musk, quien ha despedido a cientos de empleados de la Administración Federal de Aviación (FAA), incluyendo a algunos encargados del mantenimiento de infraestructuras críticas de control del tráfico aéreo, a pesar de los cinco accidentes mortales ocurridos en EE. UU. desde el día de su investidura. La preocupación por la seguridad aérea en EE. UU. ha aumentado desde que 67 personas fallecieron en un accidente el 29 de enero entre un avión de pasajeros y un helicóptero del Ejército cerca del Aeropuerto Nacional Ronald Reagan de Washington. “Diría que todos los puestos de trabajo en la FAA actualmente son cruciales para la seguridad”, afirmó Jeff Guzzetti, consultor de seguridad aérea que trabajó durante mucho tiempo tanto en la FAA como en la Junta Nacional de Seguridad del Transporte (NTSB), entidad que investiga accidentes. Estos recortes “ciertamente no van a mejorar la seguridad; solo pueden aumentar el riesgo”, añadió. Todo lo que Trump toca termina en desastre. Trump es un peligro para todos; debe irse ya.