No todos los héroes llevan capa. Agentes de la Policía Local y una barrendera lograron salvar la vida de una joven justo en el momento en el que iba saltar al vacío a una altura de unos 14 metros en la muralla de Alcúdia. Los funcionarios policiales que actuaron recuerdan que volvieron a casa con una sensación un tanto agridulce. Por una parte, satisfechos por haber salvado una vida y, por la otra, tristes por la situación que había llevado a la joven a querer quitarse la vida.
«Cuando entró la llamada nos dirigimos a la muralla y nos encontramos a la joven de espaldas, colgada desde una gran altura. En cuanto vimos la mano de la chica no nos lo pensamos dos veces y fuimos a por ella. En un primer momento conseguí sujetarla hasta la llegada de mi compañero. Acto seguido, con mucho esfuerzo, la conseguimos poner a salvo», comenta el oficial Ramón Santiago.
Desafío
«Me encontré a mi compañero al borde de la muralla y me fui enseguida a agarrarle para que no cayeran los dos. En estos casos, sacas fuerza de dónde no la hay», comenta Toni Rosselló, policía que también participó en el rescate.
Uno de los papeles clave de esta historia con final feliz lo protagonizó Maria Antonia Salord Capó, a la que desde el cuerpo de la Policía Local y el Ayuntamiento de Alcúdia le han agradecido su actuación. La barrendera fue quien alertó a las autoridades de que había una joven dispuesta a lanzarse desde lo alto de la muralla. «Al principio no sospeché absolutamente nada ya que simplemente estaba ahí sentada con el móvil. Fue más tarde cuando me percaté de que la joven estaba llorando en una actitud muy extraña y sentada en el borde de la muralla y con las piernas colgando. Ante este comportamiento que no me pareció nada normal decidí llamara a la policía».
La trabajadora también quiere destacar la rápida actuación de los policías que apenas tardaron escasos minutos en llegar al lugar. Los vecinos del municipio valoran el trabajo realizado y califican de acto heroico la actuación de los policías y de la trabajadora municipal.