No iba en un Cadillac, pero sí estaba dormido y borracho. Una jueza de Palma ha absuelto a un hombre que se quedó dormido en el arcén de la carretera Ma-19 de Palma y que dio positivo en alcohol cuando la Guardia Civil le hizo las pruebas: 0,95 y 0,96 mg por litro de aire espirado. Casi cuadruplicó la tasa máxima permitida, pero la magistrada sostiene que el acusado, de 73 años y nacionalidad española, no estaba conduciendo cuando fue sometido al test de alcoholemia.
La Fiscalía reclamaba una multa de 3.240 euros para el conductor por un delito contra la seguridad vial y la retirada del carné de conducir durante un año y nueve meses.
Los hechos enjuiciados ocurrieron sobre las 15.45 horas del 21 de abril de 2023. El procesado se quedó dormido en el asiento del conductor con el cinturón de seguridad abrochado y los agentes de la Guardia Civil que acudieron al lugar le multaron por haber estacionado el vehículo dentro de la parte transitable del arcén. A continuación le realizaron las pruebas de alcohol y dio positivo.
Uno de los agentes que declaró en el juicio contó que le tocaron la ventanilla y el hombre se despertó. El acusado les explicó que venía de una comida, que estaba cansado y había decidido dormir. Otro de los guardias civiles admitió que el coche no obstaculizaba la circulación, pero que le multaron por estar parado en el arcén. En ningún momento le vieron conduciendo.
El hombre, que fue defendido por el abogado David Barón, declaró en el juicio celebrado en Palma lo mismo que relató a los agentes. «La prueba practicada descarta que el acusado se encontrara conduciendo», concluye la sentencia de la jueza del juzgado de lo Penal número 5.
El conductor, como canta Loquillo en Cadillac solitario, se quedó dormido y borracho... en un Opel Mokka.