'La banda del bus', ya está fuera de la Isla. El juzgado ha dictado una orden de alejamiento de Mallorca para los tres arrestados de una banda que se dedicaba a desvalijar a los ancianos en los autobuses de la EMT. Agentes de la Policía Nacional en colaboración con la Policía Local de Palma han detenido a tres personas, dos hombres y una mujer, todos ellos de origen peruano como presuntos autores de 25 hurtos de teléfonos móviles, así como numerosos delitos de estafa llevadas a cabo al acceder a los terminales de las víctimas cambiando las contraseñas y vaciando las cuentas u obteniendo préstamos.
La investigación se inició en septiembre del año pasado. Los agentes responsables del caso detectaron un aumento de hurtos cometidos en las líneas de transporte, lo que gracias a las pesquisas llevaron a la identificación de los integrantes de un grupo criminal así como de otras personas que usaban como 'mulas' para la recepción del dinero que sacaban de las cuentas bancarias.
El grupo criminal era de naturaleza itinerante, cuyos componentes operan por equipos de 3 a 4 personas con estancias reducidas en la Isla y que se dedican al hurto continuado en líneas de autobuses, principalmente de teléfonos móviles que posteriormente utilizaban para cometer estafas. Los investigados accedían a las cuentas bancarias de las víctimas, en su mayoría personas de edad avanzada ocasionando un grave perjuicio económico, dejando cuentas vacías o llegando incluso a rechazar recibos ya pagados para conseguir más dinero e incluso solicitaban préstamos.
Posteriormente el dinero era transferido a otras cuentas a nombre de personas que no integraban directamente el grupo pero que actuaban como 'mulas', que se quedaban con un porcentaje y desviaban el dinero al grupo criminal. La víctima perfecta eran personas de edad avanzada ya que las mismas suelen implementar escasas medidas de seguridad en las claves de acceso, pudiendo desbloquear con facilidad los terminales.
Los peruanos detenidos son responsables de alrededor de 60 hurtos en los últimos seis meses, consiguiendo extraer dinero por importe de 50.000 euros. Los investigadores detectaron la presencia de varios integrantes que habían venido a la isla hace dos semanas y que estaban formados por tres personas perteneciente al grupo. Por tal motivo se estableció un dispositivo logrando su localización, siendo interceptados por los agentes, que comprobaron que en menos de tres horas ya habían sustraído tres teléfonos móviles y una tarjeta bancaria, realizando varios cargos y llegando a efectuar llamadas de los terminales a las diferentes entidades bancarias. Los agentes procedieron a la detención de los tres integrantes del equipo como presuntos autores de 25 hurtos, así como numerosas estafas.