No pasará a la historia por ser el ladrón más avispado. Agentes de la Policía Nacional han detenido a un español, natural de Jaén de 53 años, acusado de robar un total de 31 botellas de aceite por valor de 407 euros. El hampón no calculó bien el valor del género sustraído y por siete euros acabó pasando la noche en los calabozos.
Lo mejor del caso es que el ladrón se enfadó con el supermercado y no dudó en recriminar a los responsables de seguridad del centro comercial que por culpa de la subida de precios de los productos iba a ser detenido. Los hechos tuvieron lugar la víspera de las navidades en una conocida cadena de hipermercados de Palma. El ahora detenido, ya había intentado robar a primera hora de la mañana y al mediodía en ese mismo lugar, pero en ambas ocasiones los vigilantes lo 'cazaron' y lo echaron a la calle. Se trata de un delincuente habitual que tiene prohibida la entrada en todos los diferentes centros de la cadena.
A las 16 horas de ese mismo día, volvió a la carga. Una vigilante lo interceptó por la línea de caja cuando salía con un carrito cargado de botellas de aceite. Concretamente, llevaba un total de 31 del preciado 'oro verde'. En ese momento, se llamó a la Policía Nacional para que se hiciera cargo de la situación. El delincuente, que está muy acostumbrado a estos tipos de situaciones, estaba relativamente tranquilo. Pensaba que sus cálculos habían sido correctos y que el valor del género robado no superaría los 400 euros. Por ese motivo, todo quedaría en un simple hurto. Es decir, que le tomarían los datos y aquí no pasa nada.
La sorpresa fue mayúscula cuando le comunicaron que el precio del aceite había subido y que la cantidad del ticket era de 407 euros. Acto seguido, se le cambió la cara al darse cuenta que había cometido un robo en lugar de un hurto. Acto seguido, los policías procedieron a su arresto y el experto en 'oro verde' de Jaén acabó en los calabozos.