La Policía Nacional ha detenido a un marroquí de 46 años acusado de cometer dos violentos robos en menos de cuatro días, ambos en el barrio de Cas Capiscol de la capital balear. En el primer robo intimidó a la víctima con un cuchillo y en el segundo agredió a otra con una barra de hierro. En ambos se apoderó de los teléfonos móviles de las víctimas, que posteriormente fueron recuperados por los agentes.
El segundo de los episodios, el que le costó el arresto, tuvo lugar el pasado miércoles, sobre las 00:45 horas. El delincuente se acercó a un hombre que estaba esperando en una parada de autobús y le arrebató el móvil que llevaba en la mano. La víctima reaccionó intentando recuperar el terminal y el magrebí le agarró por el cuello y sacó una barra de hierro para amenazarle. Ambos mantuvieron un forcejeo hasta que el ladrón le golpeó en la mano derecha provocándole una lesión, emprendiendo después la huida. Los agentes efectuaron una batida por la zona y localizaron al hombre, procediendo a su identificación y recuperando el teléfono móvil sustraído.
En ese instante los agentes comprobaron que el mismo varón había sido arrestado apenas tres días antes. En esa ocasión, sobre las 15:45 horas del domingo de la semana pasada, el individuo se aproximó a otro hombre a quien mostró un cuchillo de grandes dimensiones intimidándole para que le entregara el teléfono móvil y unos auriculares. El ladrón consiguió robarle los efectos y huir del lugar arrojando el arma blanca al suelo, mientras la víctima pedía ayuda a un familiar, avisando al 091. Varias patrullas de la Policía Nacional se dirigieron al auxilio del perjudicado, consiguiendo intervenir el cuchillo e iniciando la búsqueda del ladrón. Instantes después los agentes consiguieron localizarlo en un edificio, donde había fracturado una puerta para refugiarse en el interior.