El pasado lunes por la noche, dos hombres de entre 20 y 25 años entraron en una casa vacacional en la zona antigua de Cala d'Or en la cual robaron objetos de valor de sus inquilinos. Para sorpresa de los asaltantes, que ya habían entrado una semana antes, los inquilinos incluyeron cámaras de seguridad con las que han conseguido grabar las imágenes en las que se les puede reconocer y en las que se ve como trabajan.
Según cuentan fuentes cercanas al caso, los clientes de la casa habían instalado las cámaras dado que el lunes anterior ya habían sido víctimas de un hurto protagonizado, presuntamente por los mismos individuos. Los inquilinos informaron a los dueños de la casa que se habían encontrado las puertas de armarios abiertas, la ropa removida y que les faltaban aparatos electrónicos, joyas y demás objetos de valor. Posteriormente instalaron unas pequeñas cámaras de seguridad y las vincularon con sus teléfonos móviles para poder seguir cualquier incidencia dentro de la casa. Los ladrones, al descubrir las cámaras las desconectaron como se puede ver en las imágenes, pero los clientes del inmueble ya habían recibido el vídeo.
Los propietarios del inmueble realizaron la denuncia y ya han pasado todas las imágenes a la Guardia Civil que ya se ha hecho cargo del caso y del que desconocen la autoría de los hechos dado «que no son gente de la zona», comentan.
Sin embargo, según confirman fuentes policiales, el ‘modus operandi' de los chicos es bastante acicalado para ser principiantes por lo que se intuye que no es la primera vez que actúan de esta manera. Llama la atención que en ambos casos el asalto a la casa fuese el lunes por la noche, cuando los clientes salían a cenar. Por el momento, la Guardia Civil está trabajando en conocer la identidad de los dos asaltantes.