La rápida actuación de la Guardia Civil y de las policías locales de los diferentes municipios que participaron en el operativo de seguridad de las fiestas del municipio resultó determinante para controlar el enfrentamiento entre varios grupos de jóvenes violentos. A última hora de la noche del sábado al domingo, los equipos de emergencia fueron requeridos porque en ese momento se estaba produciendo una pelea multitudinaria donde uno de los chicos -de nacionalidad marroquí- se encontraba tendido en el suelo sangrando.
Rápidamente, varias dotaciones policiales acudieron al lugar y se encontraron al herido sangrando de forma abundante a consecuencia de haber recibido una puñalada con un cuchillo. Los policías llevaron a la víctima hasta el coche patrulla para auxiliarlo y solicitaron la presencia de una ambulancia del SAMU-061. Mientras tanto, la tensión seguía creciendo entre los jóvenes de Llubí y un grupo de marroquíes de Inca que se conocían por temas futbolísticos. De hecho, en un momento dado, el grupo de foráneos comenzó a lanzar piedras contra los vehículos policiales. Acto seguido, los policías tuvieron que hacer uso de sus extensibles y se procedió a disolver el tumulto e imponer de nuevo la ley y el orden.
En cuestión de minutos, la Guardia Civil también acudió al lugar y procedieron a la detención del autor del apuñalamiento acusado de un presunto delito de lesiones graves. En sus redes sociales, los Quintos-04 expresaban su malestar. «El 3 de septiembre del año pasado ya tuvimos que hacer un comunicado pidiendo disculpas por las peleas de nuestra primera fiesta y ahora tenemos que volver de nuevo a pedir perdón a todas aquellas personas que vinieron para pasarlo bien y divertirse», concluyen.