Agentes del Grupo de Homicidios de la Policía Nacional se han hecho cargo de la investigación de un extraño caso que tiene como protagonista a un joven marroquí de 20 años que está en coma en el hospital de Son Espases. Los hechos se remontan al pasado sábado cuando, de forma algo anómala llegó hasta el hospital de referencia un paciente con múltiples golpes, inconsciente y con pronóstico crítico. Es más, en los primeros momentos, incluso los médicos que le asistieron eran conscientes de que podía perder la vida.
Rápidamente, los profesionales de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) de Son Espases atendieron al joven, lo entubaron y consiguieron estabilizarlo. El paciente desde entonces está en coma. El mismo sábado, al no tener ningún tipo de noticia sobre el paradero del joven, familiares y amigos comenzaron a buscarlo por todo. Hospitales, centros médicos, comisarías etc... Nadie les daba información y la desesperación iba creciendo a medida que transcurrían las horas. Dos días después, a uno de los allegados le comunicaron en el hospital de Son Espases que su ser querido estaba allí ingresado en la UCI.
Al entrar al verlo, la escena que se encontraron fue dantesca. El paciente presentaba un fuerte golpe en la parte trasera de la cabeza, otro debajo del ojo, las manos dañadas y muy hinchadas, además de dermoabrasiones y otro tipo de policontusiones varias por el resto del cuerpo. «Todo era muy extraño. Nadie nos decía nada y las lesiones que presenta nuestro amigo son muy graves. Nos gustaría saber ¿qué ha pasado? ¿Quién le ha hecho esto?», apunta uno de los allegados de la víctima.
Varios días después, acudieron a la Policía Nacional y contaron lo sucedido. Fuentes oficiales de la Jefatura han confirmado a Ultima Hora que nada más tener constancia de los hechos han puesto en marcha una exhaustiva investigación con la finalidad de esclarecer las causas de estas graves lesiones. Las primeras hipótesis apuntan a dos posibles causas. La primera que se trata de una brutal agresión y, la segunda, que el joven estuviera trabajando de forma irregular sin documentación, sufriera una caída o accidente y para evitar ser sancionados o tener problemas con la justicia, lo dejaran abandonado en la calle. Se sospecha que todo sucedió en una calle de la barriada de Son Gotleu el pasado sábado día 18 de febrero.
Familiares y amigos de la víctima lanzan un llamamiento a todos los ciudadanos que tengan algún tipo de información sobre lo que pudo suceder que contacten de inmediato con la Policía Nacional a través de la sala del 091. El chico, una semana después, aún sigue ingresado en la UCI y su estado es muy grave. «Hay que hacer justicia», alegan los familiares.