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Caso Cursach

'Caso Cursach': La Fiscalía agota su prueba esta jornada

Declaran cinco testigos más en la sesión de este martes del juicio

Imagen de archivo. | Víctor Malagón

| Palma |

Último día en el macro juicio en el que se interrogará a los testigos propuestos por la Fiscalía Anticorrupción. Para la sesión de este martes hay citados tres agentes de la Policía Local y los responsables de otro local, el Cha Cha Chá, también supuestamente acosado por agentes. El juicio continuará la próxima semana con la prueba propuesta por las tres acusaciones particulares que siguen manteniendo la acción penal y que, hasta ahora, han tenido un papel secundario a lo largo de las sesiones.

Al juicio le quedarían aún más de un centenar de testigos propuestos por las defensas, por lo que se especula con que alguna de las acusaciones pueda hacer algún movimiento ante la poca concreción de la mayoría de los testigos para que no sea necesario prolongar más de lo necesario las sesiones.

Finaliza la sesión

Termina la sesión y con ella la prueba de la Fiscalía. El juicio se reanuda el próximo lunes con los testigos propuestos por las acusaciones particulares.

Denuncias a Cursach

Declara un agente de la Policía Local. Dice que ha levantado actas contra Cursach y que nadie le ha pedido eliminarlas. Desmiente la versión que dio hace unos días otro agente.

Horarios

Las defensas le enseñan actas por horario. Una con el local abierto a las 8.20 y otra a las 7.30 cuando tenía que cerrar a las seis.

Desahuciado

Ahora atribuye el cierre a un impago del alquiler y su desahucio. Matiza: «Todo está unido, la gente deja de venir. No me dejaban trabajar. Si no ingresas, cómo vas a pagar».

Inspecciones en 2003

La defensa le muestra varias denuncias en el año 2003 por ruido, el año que supuestamente tenía contratado al portero que le habían recomendado los policías. Ese año entró en vigor una nueva ordenanza en torno a horarios.

"Mejor solución"

El testigo dice que no denunció porque le pareció «mejor solución» tener al personal de seguridad que le indicaron los policías. Insiste en que «no sabe por qué» hubo un cambio y comenzó a denunciarle la Patrulla Verde hasta que el establecimiento fue clausurado en 2006.

Fechas

El testigo acota: «El tema del portero ocurrió en 2002, las inspecciones empezaron en 2003 y 2004».

Local clausurado

El local, el Cha Chá fue clausurado por acumulación de sanciones por incumplir el horario. «Me multaban aunque cerrara a las seis de la mañana». El testigo identifica claramente al policía que le insistió para que le contratara seguridad privada.

Acuerdo

«Llegamos a un acuerdo para que un chico viniera de portero. No necesitaba pero llegamos al acuerdo proque me dijeron que lo tenía que hacer».

Portero

«O me pones un portero o vengo a cerrarte», dice el testigo que le transmitieron los policías.

Empresario de Platja de Palma

Un empresario cuenta que en 2002 fueron tres policías a su negocio: "Abrí en 2001, el primer año fue todo normal. La segunda temporada me apareció un grupo diciéndome que si ponía un portero de los suyos me dejarían en paz, que si no irían a por mí. Había como tres. Un tal Nicanor. Es el único nombre que recuerdo".

Una única pregunta

Declara un funcionario del ayuntamiento que declaró en la Policía Nacional en 2017. El fiscal solo le hace una pregunta: «¿Sabe por qué le llamaron a declarar?» Respuesta negativa. No hay más preguntas al testigo.

"Hubiera firmado cualquier cosa"

Asegura que, antes de su declaración, Penalva y Subirán le dijeron que le ayudarían en la pieza de las torturas. «No cumplieron». "Hubiera firmado cualquier cosa. Me dijeron que me ayudarían en el otro procedimiento".

Drogas

Niega que viera a sus compañeros vender droga ni quedarse con la que incautaban, algo que consta en su declaración. «Dice que se comenta, y yo no le he visto nunca. Es algo que Subirán quería que se dijera».

"Subirán me coaccionó"

El testigo asegura que fue coaccionado por el fiscal Subirán en su declaración judicial para que «dijera lo que él quería». Afirma que, en ese momento estaba imputado por el asunto de la patada a un detenido que el propio ex fiscal reabrió y que le amenazó con enviarle a prisión. «Dice lo que quería que dijera».

"Subirán no me dejó"

El fiscal interroga al testigo por una situación en la que se les obligaba a prestar servicio «de plantón» delante de algunos establecimientos, entre ellos el Megapark y el Bierkoning. Dice que nunca dijo que sus oficiales cobraran por ello. Que fue algo que se le introdujo en su declaración en investigación y que «Subirán no me dejó leerla».

Policía y seguridad privada

Declara un antiguo agente del Grupo de Acción Preventiva de la Policía Local. Dice que trabajaba de seguridad para un local y que ese trabajo lo consiguió a través de un empleado del Ajuntament. Dice que «no suponía ninguna ventaja» para el establecimiento tenerle a él en la puerta.

Controles de la Patrulla Verde

El testigo dice que los dos locales en los que trabajó durante alrededor de cinco años sí recibieron controles de la Patrulla Verde cuando él prestaba servicios allí. La declaración apenas ha durado cinco minutos. La sala espera al próximo testigo, también agente de la Policía Local que aún no ha llegado.

Ninguna ventaja

Asegura que los locales que tenían contratados a policías locales «no tenían ninguna ventaja con la Patrulla Verde».

Nicanor Góngora

Dice que los trabajos que realizó en dos locales se los ofreció un compañero, acusado: Nicanor Góngora. Al principio dice que era éste quien le daba el dinero y que, más tarde, cuando dejaron de tratarse, cobraba directamente del empresario.

Primer testigo

Arranca la declaración del primer testigo: un agente de la Policía Local. Prestó servicios de seguridad privada para locales hasta 2015.

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