La investigación contra el exfiscal Miguel Ángel Subirán por inducir a mentir a un testigo para que incriminara a dos inspectores de la Policía Nacional será asumida por el fiscal superior de Castilla-La Mancha, Emilio Manuel Fernández García. Al igual que ocurre con la investigación en el TSJIB, de la que se han encargado dos fiscales Anticorrupción de Madrid, se busca por parte del Ministerio Público una mayor neutralidad.
En este asunto se pretende aclarar si el exfiscal, jubilado por incapacidad, guió a un testigo del ‘caso Cursach' para que, primero denunciara una agresión falsa y, más tarde, que había sido presionado por los inspectores de policía que precisamente investigaban a Subirán. La prueba clave del caso es la grabación de una conversación que aportó el propio Subirán en el TSJIB.
Esta charla se produce después de la declaración del testigo ante la Policía Nacional y, en ella, se escucha al exfiscal preguntar por un posible trato abusivo al testigo y si han sido los dos inspectores, cuando en realidad había sido interrogado por otra unidad policial diferente. Luego, en el Tribunal Superior, la defensa del fiscal presentó un escrito en el que acusaba a ambos de «presionar» a testigos. Subirán, en paralelo ha sido procesado por el TSJIB por posibles delitos de detención ilegal y coacciones.