Teresa Bueyes, la abogada conocida por representar a famosos y que en el 'caso Cursach' lleva una de las acusaciones particulares, ha anunciado que presentará una querella al fiscal, Juan Carrau. La sesión se ha iniciado con una fuerte polémica por una publicación en redes sociales de la abogada. En ella publica una foto del interior de la sala en la que se ve su propio ordenador portátil y la bancada de las defensas. Adjunta este texto: «A veces se deberían sentar en el banquillo personas que se sientan en estrados. 26 años de abogada, siendo testigos de injusticias terribles. La injusticia no se repara con cárcel ni dinero, ni tampoco con fiscales que miran a otro lado».
Uno de los abogados que salen en la imagen, Antonio Martínez, que representa a Bartolomé Sbert, ha pedido a la Sala que adopte medidas disciplinarias, una petición a la que se ha sumado Fiscalía al entender: «Los comentarios son por sí vejatorios e injuriosos, una falta de respeto a los que estamos en estrados».
Bueyes ha tomado la palabra y ha intentado defender que ella no hizo la fotografía sin permiso del tribunal, aunque en ella se ve claramente el reborde de su portátil y el encuadre corresponde a su posición desde el estrado. También sostuvo que «mi Instagram es privado» y anunció que presentará una querella contra el fiscal, Juan Carrau.
La presidenta del tribunal, Samantha Romero, advirtió que no tolerará presiones a la Fiscalía: «Si detecto que alguna parte no está en condiciones se tomarán medidas». También que tomará un tiempo para «con sosiego» decidir qué hacer en torno a la actuación de Bueyes. Ésta, en ese momento ha dicho sentirse «muy mal» con voz quebrada y ha sido necesario parar el juicio durante cinco minutos. Continúan las declaraciones de policías locales