La Policía Nacional ha detenido a dos personas, un hombre de 31 años y una mujer de 20 años por un delito de trata de seres humanos para la explotación sexual, detención ilegal y violencia de género. En una nota de prensa, los agentes han explicado que con estas detenciones dan por finalizada la operación 'Gloria'. Las investigaciones comenzaron tras la denuncia interpuesta por una de las jóvenes a la que obligaban a prostituirse.
Por lo visto, la chica mantenía una relación con el hombre detenido, quien la obligó a prostituirse y la amenazó con matarla si se lo decía a su padre. Ante el miedo, la joven comenzó a ejercer la prostitución en un piso de la barriada de Son Dameto, en Palma, donde la policía ha indicado que podría haber más mujeres ejerciendo la prostitución. La encargada del piso, la detenida de 20 años, era totalmente consciente de que estaba realizando la prostitución en contra de su voluntad y cuando terminaba el servicio informaba al otro detenido sobre los servicios que había realizado para así quedarse ambos con todo el dinero.
La víctima tenía que pagarse la comida y cualquier cosa que necesitara, incluso los preservativos. Además, la obligaban a realizar prácticas sexuales que no deseaba o sin preservativo, algo por el que le daban más dinero pero con éste se quedaba la detenida. Desde diciembre, su novio empezó a pegarle con puñetazos y patadas, y además le insultaba. En un descuido de su «pareja» se escapó de dicho piso y denunció todo ante la Policía. Entonces, policías de UCRIF 1 pidieron autorización judicial para realizar un registro en el citado piso. En el mismo se intervinieron, entre otros efectos, un machete de 50 centímetro de hoja extremadamente afilada, tres pistolas de aire comprimido y munición para las mismas, un bate de baseball, agendas con anotaciones de los servicios realizados por las mujeres, terminales TPV para el pago con tarjeta, etc.