Un anciano ha sido condenado este miércoles en la Audiencia Provincial de Palma a dos años de prisión por abusar sexualmente de su bisnieta durante meses en un piso de la capital balear. El imputado, que no entrará en la cárcel al quedar suspendida la pena, deberá indemnizar a la menor, asistida por la abogada Tania Siquier, con 10.000 euros por daños morales. La Fiscalía ha apreciado los atenuantes de dilaciones indebidas, ya que el procedimiento estuvo parado en instrucción por causas ajenas al imputado, y la de reparación del daño al abonar la responsabilidad civil antes de la vista.
Los hechos se remontan a principios de 2018 y hasta abril de 2019, cuando la menor tenía entre 6 y 7 años. El hombre se ganó la confianza de la hija de su nieto con golosinas y regalos y aprovechando que se quedaba a solas con ella en un piso que tenía en Palma, le hizo tocamientos en la vagina y el trasero tanto por encima como por debajo de la ropa. Asimismo en una ocasión le lamió las partes bajas de la perjudicada y le instó a que le acariciara los genitales. El 18 de abril de 2019 los padres de la niña interpusieron denuncia por estos hechos.
Además de los dos años de prisión, el acusado no podrá acercarse a menos de 500 metros ni comunicarse con su bisnieta durante siete años y estará seis en libertad vigilada. Para no entrar en la cárcel no podrá delinquir los dos próximos años y tendrá que se someterse a un programa de educación sexual. El magistrado ha dictado sentencia 'in voce' en el acto.