Las primeras investigaciones a cargo del grupo de Homicidios sobre la muerte del hombre hallado este martes totalmente calcinado en una chabola de es Carnatge, en Can Pastilla, apuntan a que se debió a la mala combustión de una estufa; concretamente una calentador de aceite de parafina.
El fallecido fue encontrado en el interior de la chabola acurrucado. Está previsto que este miércoles, a primera hora de la mañana, se le practique la autopsia en el Instituto de Medicina Legal de Palma. La Policía Nacional estima como causa más probable del la muerte que se trata de una muerte accidental, y así lo han comunicado al juzgado de guardia que instruye las diligencias del caso.
Al estar totalmente calcinado, todavía faltan las pruebas de ADN para hacer una identificación completa. Pero según los testigos y vecinos de la zona, lo más probable se trata del propietario del habitáculo, pegado a los bunkers de Es Carnatge, un ciudadano cubano de 60 años, muy conocido en la zona.