Una investigación depurará responsabilidades en el accidente del ferri 'San Gwann' de la naviera FRS que ha encallado este sábado por la noche en el islote norte de Es Malvins, entre Ibiza y Formentera.
Capitanía Marítima ha señalado que el ferry accidentado iba a una «velocidad tremenda» y el «impacto ha sido muy grande», aunque la velocidad estaba dentro de la normalidad para un buque de pasaje en ese momento de la travesía, según el capitán marítimo, Luis Gascón.
Por su parte, el conseller de Movilidad y Vivienda, Josep Marí, ha reconocido que «errores técnicos» provocaron este sábado por la noche que el ferry encallara en un islote entre Ibiza y Formentera, causando heridas a más de 20 personas. Sobre las causas, desde Capitanía Marítima han destacado que existe ahora un «velo de prudencia» porque hay unas responsabilidades, incluso penales, y existe una investigación para depurarlas. En rueda de prensa, Marí ha detallado que todos los heridos son de nacionalidad española. Un helicóptero trasladó a los heridos más graves, entre ellos dos niños de 10 y 12 años, hasta el Hospital Can Misses. El pequeño de 10 años fue llevado después a la UCI pediátrica del Hospital Son Espases de Mallorca, donde permanece estable dentro de la gravedad.
El joven de 12 años ha sido dado de alta, según ha anunciado el conseller, quien ha agradecido la «capacidad de respuesta» de los organismos implicados en la atención a las víctimas. También ha resaltado la actuación de la tripulación. Marí ha reconocido que este sábado por la noche se vivieron «momentos de mucha tensión» y ha expresado la «máxima preocupación» del Govern por el estado de los heridos. En el momento del accidente viajaban en el barco un total de 35 pasajeros y 12 tripulantes.
TRES DÍAS PARA EL PLAN DE REFLOTATIMIENTO
El capitán marítimo, Luis Gascón, ha destacado que la «emergencia continúa», aunque la situación es «menos crítica» al haberse evacuado a los ocupantes. Ahora, se ha dado un plazo de tres días para que la empresa presente el plan de reflotamiento.
De acuerdo con el capitán marítimo, no se ha producido ningún vertido. «Tenemos experiencia acumulada en este sentido y las cosas requieren de un orden y nos consta que la naviera está elaborando todos los pasos para que quede solventado», ha explicado.
«Estamos en estado de alerta», ha añadido Gascón, quien ha aclarado que el accidente no ha tenido nada que ver con la situación de congestión de tráfico marítimo que pueda existir entre Ibiza y Formentera.