‘La rampa de la vergüenza'. Así han bautizado los policías e integrantes de las ONGs a la rampa del garaje de la Jefatura Superior de Policía, en la calle Simó Ballester, donde los agentes se ven obligados a tener que gestionar las detenciones e incoar los expedientes de expulsión de los inmigrantes llegados en patera.
El lugar no está preparado para acoger a personas y las condiciones de salubridad y seguridad son muy deficientes, tanto para los funcionarios como para los recién llegados.
Tras el escándalo del pasado fin de semana donde más de una treintena de inmigrantes tuvieron que pasar 48 horas tirados en el suelo de hormigón del garaje, la llegada el lunes (20 horas) y en la madrugada de este martes de dos nuevas pateras ha provocado que se repitan las imágenes de personas humanas tiradas en el suelo. La primera patera fue avistada en Portocolom, con 17 personas a bordo, y la segunda en aguas de Cabrera con 14. Todos ellos fueron rescatados.
Tiempo atrás, los equipos de emergencia y policiales atendían a los inmigrantes, con todas las garantías, en la Estación Marítima. Ante la llegada de cruceros, las instituciones (Govern y Gobierno de España) no han buscado ninguna solución generando el caos y la desesperación de todos los implicados.
Por su parte, el Sindicato Unificado de Policía (SUP) elevó este lunes un escrito al Consejo General de la Policía para intentar poner orden en este despropósito. Les ofrecemos el comunicado íntegro:
Es más que evidente, que Baleares es una vía de entrada de inmigración ilegal, sólo basta ver los números de años anteriores y sacar conclusiones, no es necesario ser analista estadístico ni experto en movimientos migratorios.
Llevamos años demandando que las autoridades competentes articulen unas infraestructuras adecuadas que cumplan con las debidas medidas de seguridad para atender y custodiar a estas personas, que nos doten de más medios materiales y más personal para desarrollar la función policial.
Entendemos que ha habido tiempo suficiente para planificar la llegada de pateras a nuestras costas para este año 2021, llevamos años denunciando la situación y el aumento de número de personas que acceden a nuestras islas de manera irregular.
Este fin de semana, hemos visto como estas personas han estado largas horas custodiadas en el garaje de nuestra Jefatura Superior de Policía, al no disponer de ningún otro sitio donde reubicarlos, sobre un suelo de cemento, siendo custodiados por policías, aun siendo contactos estrechos por COVID-19.
Nuestros compañeros nos trasladan su preocupación a la hora de afrontar este tipo de servicio, nos indican que la nota por la que se caracterizase la “improvisación”, hecho que puede generar riesgos para ellos y para las personas que llegan en patera.
Nos hemos reunido prácticamente con todos los partidos políticos y autoridades responsables para denunciar estos hechos, incluso lo planteamos en el Congreso de los Diputados, ayer (lunes para el lector) lo denunciamos en el Consejo de Policía y todo sigue igual, en estos momentos hay unos 40 pateristas, algunos sin pruebas por COVID-19 realizadas, distribuidos de manera improvisada en diversos lugares de la Jefatura Superior de Policía de Baleares, y custodiados por Policías, seguiremos denunciando.