Al ecuatoriano Patricio Arturo Gordillo le queda poco tiempo para cumplir su condena por matar a la funcionaria del Govern Maria Antònia Colom, en Santa Maria, a finales de 2002. El hombre, que se encuentra en tercer grado, tiene previsto salir de prisión en 2023, pero ha sido detenido por la Policía Nacional con un kilo y medio de cocaína.
El Grupo II de Estupefacientes, que se ha hecho cargo de la investigación, arrestó a Patricio Arturo el pasado jueves, en torno a las 18.00 horas, en un piso de la calle Médico José Darder de Palma. Los agentes estaban realizando un seguimiento a un presunto narcotraficante colombiano cuando se dieron cuenta de que había realizado una transacción al asesino de la funcionaria.
El sospechoso le entregó un kilo y medio de droga repartido en tres bolsas de medio kilo cada una. Los agentes de la Policía Nacional que llevaron a cabo los seguimientos comprobaron que los traficantes ya habían conseguido vender un kilo.
Piso franco
Los policías que detuvieron a Patricio Arturo Gordillo y al supuesto cabecilla de la red registraron un piso franco de la supuesta organización, situado en Palma, y localizaron medio kilo más de cocaína, 3.000 euros en efectivo y distintos útiles para la manipulación de la sustancia.
El ecuatoriano lleva 18 años en la cárcel tras ser condenado en 2004 por el crimen de Maria Antònia Colom. El asesino confesó ante un jurado popular en la Audiencia Provincial que la noche del 5 de noviembre de 2002 degolló a la mujer en el interior de su coche en un aparcamiento de Santa Maria, quemó su cadáver y lo abandonó en una cuneta de la carretera de Inca a Llubí. El cuerpo de la víctima fue hallado una semana después.
El presidente del tribunal del jurado, Eduardo Calderón, le impuso 20 años de prisión por asesinato y hurto. El acusado también fue declarado culpable por robar, días antes, unas joyas a la funcionaria.
El asesino trabajaba como ‘transportista' de droga para una organización de narcos
Los investigadores del Grupo II de la Policía Nacional sostienen que Patricio Arturo Gordillo trabajaba como ‘transportista' de droga para una organización de narcotraficantes. El hombre se encargaba de distribuir la cocaína siguiendo las directrices de sus superiores. Los policías también arrestaron a un colombiano que está considerado como el jefe de la presunta red. En el interior de una habitación del piso franco que utilizaba la banda, los investigadores encontraron 3.000 euros y útiles para manipular la droga.