Un hombre, de unos 35 años de edad y nacionalidad española, se debate entre la vida y la muerte en el hospital de Son Espases tras haber recibido una brutal paliza en el poblado de Son Banya. La víctima se encuentra ingresada en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) y debido a las graves lesiones que presenta se teme por su vida.
Según información a la que ha tenido acceso Ultima Hora, los hechos sucedieron en torno a las doce de la noche de ayer en el interior del poblado chabolista. Unos minutos más tarde, varios residentes llamaron al 112 para alertar de que un hombre había sufrido un accidente y que se encontraba malherido en el descampado de la entrada principal. Por ese motivo solicitaban la presencia de una ambulancia urgente.
Maniobra de distracción
Esa información era totalmente falsa y formaba parte de una maniobra de distracción ideada para no levantar sospechas y tratar de eludir una investigación policial por agresión.
Con suma rapidez agentes de la Policía Local de Palma y personal sanitario del Servei d'Atenció Mèdica Urgent (SAMU-061) se personaron en el lugar para auxiliar a la víctima. A su llegada todo era muy confuso y la colaboración de los residentes era nula. Es más, lo único que hacían era tratar de despistar a los policías con versiones totalmente inverosímiles. «Se ha caído. No sabemos muy bien lo que pasó, pero este hombre se cayó solo», decían algunos espontáneos.
Por su parte, los sanitarios trataban de estabilizar al paciente, pero por las heridas que presentaba decidieron trasladarlo de manera urgente a la UCI para lograr recuperarlo.
A su llegada, el paciente presentaba traumatismos muy severos en la cabeza, hundimiento de cráneo y sangraba de forma abundante por las orejas. Además, estaba inconsciente cuando llegaron las asistencias médicas.
A las tres de la madrugada, el Grupo de Homicidios de la Policía Nacional se personó en el hospital para iniciar una exhaustiva investigación de lo sucedido. Los facultativos informaron a los agentes de la gravedad de las lesiones y que temían por su vida. Es más, indujeron al paciente al coma.
De forma paralela, los agentes se desplazaron al poblado de Son Banya para tomar declaración a los testigos y tratar de recabar información sobre lo ocurrido. A primera hora de ayer, una comitiva policial integrada por agentes de la Unidad de Prevención y Reacción (UPR) y los investigadores del Grupo de Homicidios se personaron en el poblado para tomar declaración y realizar una completa inspección ocular y un reportaje fotográfico.
La investigación está abierta y no se descartan detenciones en las próximas horas. Este caso presenta muchas similitudes con la muerte de un turista holandés de 34 años en Son Banya. El fallecido en aquella ocasión fue el cineasta Wouter Van Luijn que acudió para comprar droga.