La mujer acusada de robar una viola del siglo XVIII en un piso de Palma en julio de 2014 reconoció los hechos este jueves en una sala de lo Penal de Vía Alemania y aceptó una condena de dos años de prisión y el pago de 4.000 euros a la propietaria del instrumento. La pena quedó suspendida por un plazo de tres años y finalmente no entrará en la cárcel, siempre y cuando la fémina no delinca en los próximos tres años, haga frente a la responsabilidad civil en dos años y no abandone el tratamiento que sigue para abandonar las drogas.
La procesada, de nacionalidad española y 42 años de edad, en el momento de los hechos compartía piso con un hombre en la calle Comte Sallent de Palma. La imputada se hizo con las llaves de la vivienda de la tía del varón con la intención de entrar a robar. Y lo hizo. Accedió a la casa, situada en la calle Femenías del Camp d'en Serralta, el 1 de julio. Una vez en el interior del inmueble se marchó con una viola fabricada a finales del siglo XVIII, cuyo valor los investigadores creyeron que estaba fijado en los 8.000 euros. Sin embargo, un perito la tasó en 4.000. Hecho irrelevante para la pena impuesta a la procesada.
En el momento de los hechos la mujer, tal y como sostenía la Fiscalía, tenía afectada su capacidad intelectiva y volitiva por tener diagnosticado trastorno de personalidad y dependencia de las drogas y el alcohol. Este hecho fue tenido en cuenta como atenuante a la hora de alcanzar un acuerdo de conformidad antes de celebrarse la vista.