Alarma y preocupación por parte de los equipos de emergencia y policiales por la saturación de vehículos de la carretera de sa Calobra.
Se trata de una carretera muy estrecha y cualquier pequeña incidencia genera atascos monumentales y situaciones de riesgo al no poder acceder las ambulancias, bomberos o la propia policía.
Lo más sorprendente es que no se ejerce ningún tipo de control de vehículos ni de aforo. Los incumplimientos en materia sanitaria y de seguridad son máximos, tanto con turistas como con residentes