Los tres incendios forestales iniciados en los últimos días y que permanecen activos en tres municipios de Ourense han quemado casi 850 hectáreas, según los cálculos provisionales de la Xunta.
El incendio forestal que se inició en la tarde del viernes en el ayuntamiento de Monterrei (Ourense) permanece activo y afecta ya a unas 450 hectáreas, según los datos de la administración gallega, que ha desactivado la situación operativa dos en el frente ya que ha dejado de amenazar a núcleos de población.
La Consellería de Medio Rural informa en su último comunicado de la anulación de la medida preventiva, que se activó a las 22.42 horas del viernes por la proximidad del foco a núcleos habitados del lugar de A Salgueira y llevó a pedir la colaboración de la Unidad Militar de Emergencias (UME).
La situación operativa de nivel dos se activa cuando se considera que un fuego puede afectar gravemente tanto a la población como a bienes de naturaleza no forestal y, a la par, ante la adopción inmediata de medidas de protección y socorro, tales como la incorporación de medios extraordinarios a solicitud de la comunidad autónoma.
En el incendio de Monterrei trabajan un técnico, 11 agentes, 21 brigadas, 18 motobombas, 7 helicópteros y 9 aviones, así como efectivos de la UME.
En el incendio de Viana do Bolo, activo desde las 20.28 horas del jueves en la parroquia de Vilardemilo y que comenzó en cinco focos diferentes al atardecer, lo que ha llevado a las autoridades a pensar que fue provocado de forma intencionada, la superficie quemada provisional es de 250 hectáreas.
Allí trabajan 1 técnico, 16 agentes, 44 brigadas, 20 motobombas, 8 helicópteros y 8 aviones.
Por último, en Verín permanece controlado desde las 14.43 horas del viernes el foco de la parroquia de Queirugás, que se inició el viernes y afecta según las estimaciones a 144 hectáreas.
Para acabar con este fuego trabajan 1 técnico, 16 agentes, 30 brigadas, 14 motobombas, 10 helicópteros y 9 aviones.