El Govern balear, el Consell de Mallorca y el Ayuntamiento de Palma han guardado un minuto de silencio este mediodía en condena por el asesinato machista de Palma, una lacra social que los principales dirigentes de las islas han llamado a denunciar porque «no es un problema individual, sino de sociedad».
En diferentes actos convocados frente a esas tres instituciones, sin asistencia de ciudadanos debido a la COVID-19, los dirigentes baleares han mostrado su condena al asesinato de Lillemor Christina Sundberg, la mujer de 52 años que falleció ayer martes en el Hospital de Son Espases tras sufrir una brutal paliza de manos de su marido el pasado 13 de julio.
Frente al Consolat de Mar, representantes del Ejecutivo autonómico han guardado un minuto de silencio encabezados por la presidenta del Govern balear, Francina Armengol, quien ha condenado el hecho de que se maltrate y se asesine a mujeres «simplemente por ser mujeres».
Armengol ha enviado sus condolencias a la familia y amigos de la víctima, que también ha hecho llegar al cónsul de Suecia, país del que era nacional la víctima.
Ha recordado que es la primera mujer asesinada por violencia machista este año y la número 37 en Baleares desde que se contabilizan estas muertes, lo que demuestra que en las islas existe un «problema» contra el que el Govern seguirá luchando.
Y ha hecho una llamada a la ciudadanía balear para que denuncie este tipo de hechos, porque «no es un problema individual, no es un problema de casa, sino un problema de la sociedad, un problema colectivo».
«Tenemos que ser capaces de darnos apoyos y cuidarnos los unos a los otros», ha dicho la presidenta para llamar a la militancia activa individual contra la violencia machista y a denunciar los casos de maltrato físico o psicológico contra las mujeres.
En la plaza de Cort se han concentrado la delegada del Gobierno en Baleares, Aina Calvo, y el alcalde de Palma, José Hila, entre otros representantes municipales.
Calvo ha remarcado la «muerte absolutamente injusta» de la mujer, que demuestra que no se puede «bajar la guardia». «Es muy importante la denuncia, es fundamental visibilizar la problemática», ha destacado la delegada, porque a veces, ha indicado, las víctimas vuelven con su maltratador y, como ocurrió en Palma, son asesinadas por él.
«Que nos sirva para hacer una llamada a que las mujeres no se sientan solas, que se sientan acompañadas por la sociedad, que no renuncien a este derecho a la denuncia», ha dicho.
Para el alcalde de Palma, el asesinato ocurrido en el barrio de Son Cotoner de la ciudad «recuerda que hay que trabajar para que la igualdad sea real y no haya hombres que se crean en posesión de ninguna mujer».
La de la violencia machista, ha dicho, es una «lacra que lleva con nosotros muchos años» y hechos como este reafirman al consistorio «en la lucha por la igualdad y contra la violencia machista».
«Que este compromiso se haga aún mas fuerte y radical», ha afirmado para añadir que «si en algo hay que ser radicales es en cosas como estas, como es salvar la vida de una mujer».
Hila también ha informado de que el Ayuntamiento está en contacto con la familia de la víctima para ayudar en los posibles trámites de repatriación del cadáver, ya que sus familiares no residen en Mallorca.
El Consell de Mallorca también ha guardado en sus diversas sedes un minuto de silencio, en el que ha participado la presidenta, Catalina Cladera, junto con otros consellers y funcionarios de la institución insular.
En un comunicado, el Consell ha informado de que se ha puesto en contacto con el consulado sueco en Mallorca para ofrecer asesoramiento jurídico y apoyo social a la familia de la mujer asesinada.