El joven acusado de romper la nariz a otro de un puñetazo en un local de fiesta en Palma en agosto de 2019 aceptó este miércoles en un juzgado de lo Penal de Vía Alemania una condena de un año y ocho meses de prisión.
El imputado se declaró autor de un delito de lesiones y además de la pena privativa de libertad tendrá que indemnizar a la víctima en 2.000 euros por las heridas sufridas tras el incidente entre ambos.
Discusión
Según relata la Fiscalía en su escrito de acusación, el agresor lanzó una botella contra un grupo de personas, entre las que se encontraba la víctima. Este le recriminó la acción y el acusado, de 20 años, y que cuenta con antecedentes por hechos similares, reaccionó de forma violenta. Le dio un empujón, dos bofetones y posteriormente fuertes puñetazos en la cara y patadas por todo el cuerpo. Una tercera persona pudo separarlos y que la cosa no acabase aún peor. En un principio la Fiscalía pedía para el procesado, defendido por el abogado Rafael Llompart, dos años de prisión. Tras un acuerdo entre las partes antes de la vista la pena quedó fijada en un año y ocho meses. La condena quedó suspendida por un plazo de tres años con la condición de que el joven no vuelva a delinquir y que pague los 2.000 euros a la víctima antes de cuatro meses.