Dos hermanas han sido condenadas a sendas multas por intentar asfixiar a su inquilina en un apartamento de Cala Major a principios de 2018. El juez impone una multa de 600 euros a una de las agresoras por un delito leve de lesiones y 1.200 a la otra mujer por el mismo delito y también por coacciones.
El juez de Instrucción número 6 de Palma considera probado que la agresión tuvo lugar el 8 de febrero. Las hermanas intentaron asfixiar a la víctima agarrándola del cuello. La inquilina perdió la conciencia y la agresión se detuvo cuando llegó la Policía Nacional al domicilio.
Las heridas de la perjudicada tardaron doce días en curar. Las lesiones que presentan las denunciadas, según el fallo, o no derivan de los hechos o fueron causadas por legítima defensa de la víctima. Un hombre y otra mujer han quedado absueltos.
Luz
La sentencia sostiene que una de las acusadas cortó la luz del apartamento en el que residía la denunciante por presuntas deudas derivadas del alquiler.
La víctima, en este diario.
«Las dos hermanas pretenden presentar una riña mutuamente aceptada, pero la declaración del policía que intervino es harto elocuente: vio perfectamente cómo una de ellas estrangulaba a la víctima», explica el juez Antoni Rotger, quien opina en la resolución que los hechos «deberían ser constitutivos de un delito de homicidio en grado de tentativa».
La perjudicada explicó a este diario tras sufrir la agresión que las dos hermanas le decían que se muriera ya mientras la estrangulaban. Un de las mujeres, según la víctima, le comentó durante el forcejeo: «Tengo una pistola de nueve milímetros, te mato ahora mismo. La furgoneta está fuera, te entierro y no se entera nadie».