José Ángel Prenda, uno de los cuatro acusados de presuntos abusos sexuales a una joven en Pozoblanco (Córdoba), ha reconocido «haber grabado» los vídeos que muestran los supuestos hechos y que lo «pasó» sin el conocimiento del resto de encartados.
Durante su intervención en el derecho a la última palabra, el acusado ha afirmado que reconoce «haber grabado» las imágenes desde «el móvil de Antonio», otro de los acusados, y «haberlo pasado sin el conocimiento de ninguno de ellos».
Por su parte, el resto de acusados no han ejercido su derecho a la última palabra y el juicio ha concluido y ha quedado visto para sentencia.