Sin sorpresas. Una nueva vista previa del juicio por el atropello mortal de la joven Paula Fornés, que murió arrollada por una conductora ebria en junio de 2018 en sa Ràpita, finalizó una vez más sin acuerdo. Ante esta situación, el juez de lo Penal número 3 citó a las partes para el inicio del juicio el próximo 12 de noviembre.
La familia y amigos de Paula que acudieron a los juzgados de Vía Alemania con una camiseta reclamando justicia para la joven se mostraron indignados con las peticiones que realizó el abogado de la acusada, que solicitó la absolución de la autora del atropello que causó la muerte de la joven por unas supuestas irregularidades a la hora de leerle los derechos a su clienta. Su tío, José Fernández, que ejerce de portavoz, explicó a la salida de la vista cómo se siente la familia. «Para nosotros es un insulto a la inteligencia que se pida la absolución para la asesina de Paula», apuntó.
La Fiscalía solicita para la mujer, de nacionalidad polaca, cinco años de prisión y una multa de hasta 3.600 euros por los delitos de homicidio imprudente, lesiones imprudentes, falsedad en documentos públicos y conducción sin licencia. La acusación particular, también la culpa de omitir el deber del socorro y de conducir de manera temeraria y por todo ello pide 11 años de privación de libertad. La defensa, por su parte, solicita la absolución, esgrimiendo que se vulneraron derechos fundamentales de la mujer y que el aparato utilizado para realizarle la prueba de alcoholemia no cumplía todos los requisitos legales.
El suceso tuvo lugar la noche de San Juan de 2018. La acusada conducía el vehículo de su marido sin seguro y después de consumir importantes cantidades de alcohol. Al llegar a la avenida Miramar de sa Ràpita invadió un carril bici y arrolló a dos menores, una de ellas, Paula Fornés de tan solo 15 años, falleció casi en el acto. Casi un año y medio después se sentará en el banquillo de los acusados.